Lee un resumen rápido generado por IA
El think tank OIKOS, entidad autónoma que tiene como objetivo la protección del medioambiente como fuente de riqueza para nuestras sociedades, propone un sistema de dividendos climáticos progresivo que se adapte a las particularidades regionales y demográficas de España para garantizar una transición energética justa e inclusiva.
Su propuesta permite abordar los retos del Plan Social para el Clima que España deberá presentar ante la Unión Europea antes del 30 de junio lo que supone una oportunidad para diseñar políticas inclusivas que equilibren ambición ambiental y justicia social ya que, a diferencia de otros países de nuestro entorno, España todavía no ha destinado los ingresos procedentes de la recaudación de derechos de emisión a políticas sociales tangibles.
En su informe Dividendos climáticos ¿Cómo impulsar la transición energética justa para lograr un mayor apoyo social?, que se presentará mañana miércoles 29 de enero en el Congreso de los Diputados con la participación de expertos y representantes de los grupos parlamentarios, el think tank señala que la distribución directa y equitativa de los ingresos de la descarbonización puede transformar una política percibida como regresiva en una solución tangible y justa que mejora el bienestar económico y fortalece el respaldo social.
“Se conseguiría invertir la percepción negativa de los ciudadanos de a pie de calle de que las políticas climáticas son esfuerzos concretos e inmediatos con beneficios difusos y futuros. Con el dividendo, se invierte el esquema: los beneficios son tangibles en el presente y el esfuerzo está distribuido a lo largo del tiempo”, explica Toni Timoner, cofundador de OIKOS y coordinador de este informe.
Un esquema de pagos proporcional al impacto de las políticas climáticas
OIKOS propone utilizar los ingresos estimados del ETS (Sistema de Comercio de Emisiones de la Unión Europea) para financiar pagos directos anuales ajustados por criterios como la residencia (zonas rurales, intermedias o urbanas), la composición familiar, los niveles de ingresos, así como las fluctuaciones del precio de carbono.
Por ejemplo, un hogar de dos adultos y un dependiente recibiría entre 125 y 500 euros anuales. Un adulto en zona rural recibiría 200€ mientras que el mismo en zona urbana recibiría 100€. La mitad del importe en caso de ser menor. Y, en zona intermedia, el adulto recibiría 100€ y el menor 75€ anuales.
La propuesta de dividendo climático requiere un presupuesto estimado de 4.137,78 millones de euros anuales y está inspirada en el modelo austriaco, pero incorporando diferencias según ingresos para asegurar que las personas con menores recursos reciban proporcionalmente más, maximizando el impacto redistributivo.
Modelos de gobernanza en la gestión de ingresos
El manejo de los ingresos generados por los precios del carbono es crucial en las políticas climáticas globales que reflejan prioridades variadas. En algunas jurisdicciones/lugares del mundo se destina la mayor parte de los ingresos generados por la tarificación del carbono a proyectos ambientales, mientras que en otras optan por reintegrarlos a los ciudadanos a través de transferencias directas o integrándolos en sus presupuestos generales.
Los casos de Austria, Canadá y Suiza ilustran cómo diferentes países han gestionado el reciclaje de los ingresos del carbono. Austria, por ejemplo, ha priorizado transferencias sociales con el Klimabonus, mientras que Canadá devuelve el 90% de los ingresos directamente a los hogares optando por un esquema de pagos directos trimestrales. Por su parte, Suiza utiliza los ingresos para reducir costos en el seguro médico.
En el caso de España, muchas políticas climáticas generan resultados abstractos y lejanos, como reducciones de emisiones a largo plazo, que los ciudadanos perciben como esfuerzos presentes sin beneficio inmediato. Un dividendo climático universal garantiza que todas las personas que lo necesitan lo reciban, al eliminar requisitos administrativos y automatizar su asignación superando el problema de exclusión de las personas y hogares más vulnerables.
Accede a más información responsable en nuestra biblioteca digital de publicaciones Corresponsables.