Ayer se entregaron en el Teatro Real (Madrid) los premios que concede el programa L’Oréal-UNESCO ‘For Women in Science’, que este año celebra su 25 aniversario a nivel internacional. En el caso de España, hablamos de la 17ª edición de estos galardones, dotados con 15.000 euros, y que reconocen el valor de las investigaciones de cinco jóvenes científicas nacionales menores de 40 años. Además, este año, por primera vez, todas las investigaciones se enmarcan bajo la nueva denominación única de ‘Ciencias de la Vida y Medio ambiente’.
Reconocer el liderazgo femenino y el talento joven de estas científicas son por tanto las dos motivaciones principales de esos premios, concedidos por un experimentado jurado formado por cuatro diferentes expertos en el ámbito de las Ciencias de la Vida y del Medio Ambiente: Ángela Nieto, jefa de Grupo del Instituto de Neurociencias CSIC-UMH y Laureada por Europa en 2022 en la versión internacional de los galardones; María A. Blasco Marhuenda, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas CNIO; María Vallet-Regí, Catedrática de Química Inorgánica en la Facultad de Farmacia de la UCM y Académica de número de las Reales Academias de Ingeniería y Farmacia; y Rafael Garesse Alarcón, Catedrático en Bioquímica y Biología Molecular en la Universidad Autónoma de Madrid, de la que ha sido Rector hasta el año 2021.
Durante el acto de entrega, Juan Alonso de Lomas, CEO de L’Oréal España y Portugal, reconoció la importancia de hacer visibles a las mujeres en la ciencia, rol fundamental del programa L’Oréal-UNESCO ‘For Women In Science’: “Llevamos 17 ediciones premiando el talento femenino en España. 17 ediciones en las que 82 mujeres han impulsado su carrera gracias a este programa que potencia el liderazgo y pone a la ciencia en el centro del conocimiento”.
De Lomas también destacó que el objetivo de estos premios es “dar voz a las mujeres científicas, que no haya techo de cristal y que alcancen su máximo potencial”.
El ejecutivo subrayó además la importancia de integrar las Ciencias del Medio Ambiente entre las categorías a concurso: “La ciencia contribuirá de manera significativa a responder a los desafíos que plantea el cambio climático y, por tanto, los proyectos desarrollados por científicas en España en el área medioambiental deben ser reconocidos e impulsados”.
Las enfermedades neurodegenerativas y la lucha contra el cáncer, presentes en las investigaciones premiadas
El Parkinson es una de las enfermedades neurodegenerativas con mayor incidencia en España y aún no se comprende su causa, ni sus mecanismos de progresión. Por lo tanto, uno de los mayores desafíos en la investigación reside en identificar las causas de la enfermedad de Parkinson y cómo se desarrolla en el cerebro. Este es precisamente el foco del proyecto de la científica Patricia González (Cádiz, 1983), de la Universidad de Sevilla /Instituto de Biomedicina de Sevilla, que se ha marcado como objetivo de su investigación entender mejor la fisiopatología de la enfermedad de Parkinson y con ello contribuir al desarrollo de nuevas terapias que mejorarán la calidad y esperanza de vida de los pacientes con Parkinson.
Por su parte, la investigadora de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), Amaia Arruabarrena-Aristorena (San Sebastián, 1987), se ha centrado en el estudio de alteraciones cooperativas en reguladores de la cromatina, es decir de la estructura condensada de nuestro ADN, relacionadas con el desarrollo del cáncer. El objetivo de la científica es sentar las bases de la regulación epigenética en el cáncer de mama, con el fin último de obtener una visión mecanística dirigida a la implementación de terapias personalizadas para los pacientes.
Esta no es la única investigación galardonada este año en este campo, ya que el proyecto de la doctora Cristina Viéitez (León, 1984) del Instituto de Biología Funcional y Genómica (IBFG) de Salamanca se centra en las histonas, unas proteínas que empaquetan los dos metros de ADN en el núcleo microscópico de nuestras células y cuyo mal funcionamiento está detrás de enfermedades como el cáncer. En este sentido, los resultados de su proyecto tienen el potencial de revolucionar el campo de la Epigenética con la finalidad de reducir los nocivos efectos secundarios de los tratamientos actuales.
La inteligencia artificial y la ecología, a disposición de la ciencia
El siglo XXI plantea a la humanidad desafíos ambientales y médicos sin precedentes, que requerirán enfoques innovadores para su resolución. El diseño de proteínas con propiedades personalizadas será clave para lograr soluciones en campos tan diversos como la Biomedicina o el Medio Ambiente. En este punto se enfoca la investigación de Noelia Ferruz (Zaragoza, 1988) en el Instituto de Biología Molecular de Barcelona. La doctora centra su trabajo en el uso de técnicas avanzadas de inteligencia artificial (IA) para el procesamiento de lenguaje. Su proyecto constituye una forma fundamentalmente nueva de generar proteínas con funciones a la carta, que podrán usarse para el tratamiento de enfermedades o para paliar los efectos del cambio climático.
Por último, el proyecto de investigación de Nuria Galiana (Tortosa, 1988), científica en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, estudia la influencia de las interacciones bióticas entre las especies para la distribución espacial de estas en el mundo, un campo emergente que está evolucionando muy rápido. El objetivo principal de su proyecto es generar conocimiento para poder diseñar estrategias de conservación informadas; es decir, entender cómo cambian los ecosistemas y cómo se ven afectados por el cambio climático para, posteriormente, poder diseñar estrategias de conservación más efectivas.
Mensaje de la Vicepresidenta Ribera
Tras un coloquio en el que participaron las cinco investigadoras premiadas, y que fue conducido por el maestro de ceremonias de la gala, el comunicador científico Pere Estupinyà, se produjo la intervención, mediante un mensaje grabado en vídeo, de la Vicepresidenta Tercera y Ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, quien felicitó a las científicas galardonas para a continuación calificar de “sensible, emotivo e importante” el hecho de la incorporación dentro de este programa promovido por L’Oréal y la UNESCO de una distinción para las cuestiones relacionadas con las ciencias ambientales y la protección del medio ambiente.
Ribera hizo hincapié además en la necesidad de la “visibilización de las mujeres en ciencia”, tarea en la que “todavía queda mucho por hacer”. La Vicepresidenta reafirmó el compromiso de las administraciones y entidades públicas con las mujeres para que cuenten “con las condiciones de trabajo y de reconocimiento que nos permitan a todas conciliar la vida personal con la laboral, para que nadie tenga que elegir entre una cosa u otra”.
L’Oréal-UNESCO ‘For Women in Science’, el programa global para apoyar el liderazgo científico femenino
Con presencia en 117 países, el programa L’Oréal-UNESCO ‘For Women in Science’ tiene como objetivo impulsar la visibilidad de la mujer y el liderazgo femenino en el ámbito científico. Con este fin, cada año reconoce a cinco eminentes científicas de todo el mundo, una por continente, que reciben una dotación económica de 100.000 euros para financiar sus investigaciones y favorecer que sigan contribuyendo de forma excepcional al progreso de la ciencia. En total, desde su creación en 1998 ha reconocido la labor de más de 3.900 científicas, como las españolas Margarita Salas o Ángela Nieto, Laureada por Europa en la última edición.