Vivimos en un mundo cada vez más globalizado, en el que la movilidad de personas fuera de sus países de origen se ha multiplicado de forma exponencial en las últimas décadas. Esta transformación se ha reflejado en nuestras sociedades, cada vez más diversa.
El Mes Europeo de la Diversidad ha sido una oportunidad excelente para poner en valor los aspectos positivos y enriquecedores de la diversidad, y para seguir trabajando en pro de su promoción. Para ello, tenemos que ser capaces de entender la diversidad desde una perspectiva global, tanto de género como de edad, nacionalidad, cultural, religión, etc.
Enfrentamos numerosos desafíos en materia económica, de justicia social y medioambiental. Si queremos ser capaces de abordarlos debemos apostar por la diversidad como pilar estratégico. Todos tenemos que contribuir a través de iniciativas, compromisos y acciones conjuntas. En ese sentido, las empresas desempeñamos un papel clave fomentando la diversidad en nuestros equipos, y trabajando para ser un mejor reflejo de nuestras sociedades.
La diversidad es una fortaleza si se sabe acompañar de un buen clima de inclusión. Conseguirlo plantea retos, pero es una pieza fundamental que deberán potenciar las empresas si quieren que la mirada conjunta de sus empleados contribuya a resolver los desafíos de nuestra sociedad actual.
La diversidad inclusiva permite generar conversaciones de mayor riqueza en las que se fomenta la creatividad y un ambiente de bienestar. Con este propósito, todos los Danoners tienen acceso a formaciones donde se explican los beneficios que aporta fomentar la diversidad y cuál es su rol clave para contribuir a la inclusión de todas las personas.
Buscamos convertirles en agentes de cambio y dotarlos de las herramientas adecuadas. Se ha comprobado que las organizaciones que trabajan en su estrategia de Diversidad e Inclusión tienen un 70% más de probabilidades de…
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