Ante la causa de las personas refugiadas y la protección de sus derechos, es fundamental poder trabajar de la mano de organizaciones expertas que entiendan las necesidades y tengan la capacidad de ofrecer la respuesta adecuada. Por este motivo hablamos en el día mundial de las personas refugiadas de la alianza entre ACNUR y Deloitte y de cómo trabajar más allá de impulsos puntuales en algunos momentos críticos.
En Deloitte tenemos el propósito de tener un impacto positivo, relevante, en cada proyecto que llevamos a cabo. Nuestro lema make and impact that matters abarca lo que afecta al negocio, a nuestro Talento, y el impacto que podemos generar en la sociedad.
Para tener un impacto positivo en la sociedad, en los colectivos más vulnerables, necesitamos aliados sólidos, organizaciones sin ánimo de lucro que nos ayuden a concretar ese propósito acercándonos aquellas realidades más complejas e identificando las necesidades donde podemos colaborar de muy diversas formas.
En nuestro caso, canalizamos nuestra acción social a través de donaciones, de voluntariado, y de servicios profesionales pro bono que ofrecemos gratuitamente a organizaciones como ACNUR. Este tipo de alianzas van más allá de la mera colaboración económica, suponen la oportunidad de sensibilizar a toda la empresa y hacer visible la causa, en este caso, de quienes han tenido que huir de su casa y necesitan una especial protección.
En los casos de emergencias y crisis humanitarias sobrevenidas, ya sean provocadas por un conflicto o por desastres naturales, es fundamental poder contar con aliados con experiencia y capacidad de rápida reacción. Para Deloitte es una garantía contar con una alianza así en la que, además, podemos colaborar de manera coordinada entre los 150 países que conforman nuestra red mundial.
Así lo hemos hecho, por ejemplo, tras la invasión de Ucrania donde ACNUR fue elegida organización receptora de fondos a nivel mundial para apoyar su respuesta. No podemos olvidar que en este tipo de situaciones, donde aflora la buena voluntad individual y colectiva sin conocimiento profesional, es imprescindible apoyarse en organizaciones expertas en el trabajo en estas condiciones para que la ayuda sea realmente eficaz y eficiente.
Quiero recordar también la importancia de la educación en contextos de emergencia, en todos aquellos conflictos olvidados donde millones de personas, especialmente los niños, ven vulnerado su derecho a una educación de calidad en campos de refugiados (y también en los casos de desplazados internos y refugiados urbanos).
Desde Deloitte apoyamos recientemente el trabajo educativo de ACNUR en República Democrática del Congo (y lo hemos hecho los últimos años también con otras organizaciones en otros países como Malawi, Chad o Colombia por poner algún ejemplo) para que miles de niños puedan acceder a la educación.
Para las personas refugiadas la educación va mucho más allá del necesario conocimiento académico. También implica protección. Significa esperanza, futuro, y trabaja en temas tan imprescindibles como la educación para la paz, o el acompañamiento psicológico a las personas que han vivido el trauma de sufrir un conflicto, una catástrofe, y tener que dejarlo todo.
Estamos viviendo una época muy compleja respecto a la movilidad humana, pero, además de enfrentarnos a la dificultad que conlleva la gestión y protección en todos los niveles y regiones, también hemos visto la esperanza de la solidaridad que logran canalizar organizaciones humanitarias y cómo las respuestas organizadas entre la sociedad civil, las empresas y, sobre todo, las políticas públicas coordinadas internacionalmente, pueden ofrecer una mejor protección e integración de las personas refugiadas.
Obviamente, el objetivo que tenemos como sociedad es trabajar las causas y que nadie tenga que huir de su lugar de origen contra su voluntad. Mientras tanto, debemos trabajar alianzas con sentido que aseguren la protección, el acceso a derechos fundamentales, y ofrezcan un mejor futuro a los millones de personas refugiadas que hay en el mundo.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Dia Mundial del Refugiado, promovido por el Comité Español de ACNUR.
