Afortunadamente, hemos avanzado mucho en la consolidación de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras, pero aún existen ámbitos que requieren redoblar nuestros esfuerzos como es en la igualdad efectiva por razón de género en todas las facetas de la sociedad y, por ende, en nuestra empresa, cualquier otra alternativa a dicha equidad es, cuando menos, inadmisible.
Cuando fui nombrado Director de Personas, una de las primeras frases que me vino a la mente fue aquella del presidente John Fitzgerald Kennedy: “Yo no digo que todos sean iguales en su habilidad, carácter o motivaciones, pero sí afirmo que debieran ser iguales en su oportunidad para desarrollar el propio carácter, su motivación y sus habilidades.”
Desde ENAIRE tenemos un claro compromiso con esta premisa, promoviendo y garantizando la igualdad de oportunidades y rechazando cualquier discriminación laboral por razón de género.
La plantilla de ENAIRE (de casi 4.000 personas) está compuesta por dos colectivos: el Colectivo de Control de Tránsito Aéreo y el del personal adscrito al I Convenio Colectivo de Grupo, que engloba a profesionales de áreas muy diversas relacionadas con el negocio de la Entidad (personal de mantenimiento y explotación técnica, de operaciones, de sistemas e instalaciones, de seguridad operativa y finalmente de servicios, entre los que se encuentran el personal administrativo, de calidad y medio ambiente, de comunicación, económico administrativo, jurídico, de planificación, de RRHH, de servicios y mantenimiento general y de sistemas de información…).
Cada uno de estos dos colectivos se rige por su propio convenio y en correspondencia con ello, cada uno tiene su propio plan de igualdad.
El Plan de Igualdad del colectivo de control de tránsito aéreo se acordó con la representación de los sindicatos en diciembre de 2018, entrando en vigor el 19 de marzo de 2019 tras su publicación en BOE. Por su parte, el Plan de Igualdad del personal adscrito al convenio de grupo está incorporado al texto convencional como anexo nº VI.
Sin embargo, tras publicarse los R.D. 901 por el que se regulan los Planes de Igualdad y su registro y el R.D. 902 sobre igualdad retributiva entre mujeres y hombres, ambos de 13 de octubre de 2020, hubo que ponerse manos a la obra inmediatamente para adecuar los planes existentes a la nueva realidad contenida en dichos RR.DD., que recogen aspectos tales como el concepto de trabajo de igual valor, la obligación del registro retributivo desarrollando, entre otros aspectos, los criterios concretos para desagregar por sexo la información retributiva de la empresa; los sistemas de clasificación profesional contenidos en los convenios colectivos y su necesaria vinculación con el registro y la transparencia retributiva a través de una correcta valoración de los puestos de trabajo, así como el derecho de las personas trabajadoras a acceder al contenido del registro.
Por tanto, hubo que ampliar el contenido y el alcance de los planes, para garantizar que incluyeran trasversalmente todos los aspectos de la gestión de personas en la entidad.
Y así, como primera de las actuaciones se facilitó a la representación laboral el registro retributivo de manera diferenciada para el personal de cada uno de los convenios colectivos. A continuación, procedimos a la valoración de los puestos de trabajo del personal adscrito a cada uno de los convenios.
Por otro lado, se analizaron los datos cuantitativos de las plantillas adscritas a cada uno de los convenios y llegamos a la conclusión de que ENAIRE, en ambos convenios colectivos, está masculinizada, al superar los hombres de la plantilla el 60% de los efectivos, constatándose que esta circunstancia se debe fundamentalmente al sector de actividad de la empresa, inserto en el ámbito de los estudios STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics), con una tradicional prevalencia masculina.
Sin embargo y a pesar de estos datos que deben mejorarse sin duda, también apreciamos que nuestra empresa se encuentra en una posición más favorable que la media de las empresas del sector en el ámbito nacional e internacional, lo que no debe hacer que nos relajemos sino incentivarnos para redoblar nuestros esfuerzos y lograr una mayor presencia de la mujer en nuestra empresa, en todas sus áreas incluida, por supuesto, la directiva.
Además, se constató la existencia de infrarrepresentación femenina en determinados colectivos más masculinizados en el ámbito del I Convenio de Grupo (por ejemplo los departamentos de mantenimiento y de sistemas), circunstancia que en el caso del colectivo de control no se detectó a nivel horizontal pero sí en los puestos de responsabilidad que conforman los puestos de la carrera profesional.
En el resto de las áreas que fueron objeto de análisis no se detectaron deficiencias significativas que pudieran representar un obstáculo a la hora de aplicar, de manera transversal en todos los ámbitos de la empresa, los principios de igualdad de condiciones y oportunidades por razón de género: 103 medidas para los planes de igualdad de ENAIRE.
Después de escuchar a todos los actores implicados y estudiar todas las circunstancias, en ENAIRE propusimos un total de 103 medidas de igualdad para ambos convenios que están orientadas a mejorar nuestro compromiso con la igualdad entre hombres y mujeres en nuestra organización. Entre ellas destacamos:
- Garantizar la igualdad en el proceso de selección y contratación, intentando atenuar la masculinización de la empresa, adoptando medidas para fomentar la incorporación de mujeres y visibilizar a las profesionales de ENAIRE que sirvan de modelo a futuras candidatas, así como a las jóvenes que se estén planteando orientarse a estudios del ámbito de las ciencias y la tecnología.
- Asegurar que se mantienen las actuales condiciones respetuosas con ambos sexos en materia de clasificación y formación profesional, considerando que la formación profesional garantiza la igualdad de ambos géneros en la plantilla.
- Adoptando medidas que fomenten la participación de las mujeres en los procesos de promoción profesional.
- Analizar las distintas opciones que ofrecen las medidas de conciliación, para examinar detalladamente las posibilidades de mejora y reforzar sus fortalezas, con la máxima de que el hecho de dedicar tiempo a las necesidades familiares no suponga un freno al desarrollo profesional en ENAIRE, así como a fomentar la corresponsabilidad del personal en el campo de los cuidados a familiares.
- Se han incluido medidas para monitorizar de manera permanente que la comunicación verbal o no verbal, tanto interna como externa de la empresa sea inclusiva.
- Se han incluido medidas para garantizar que se mantiene la igualdad retributiva por razón de género, analizando anualmente el registro salarial al objeto de adoptar medidas correctivas si se detectara alguna desviación.
- Compromiso claro en materia de prevención del acoso sexual y por razón de sexo, así como su máxima observación de todas las garantías en el ámbito del procedimiento que en su caso fuera necesario incoar para combatir aquellos supuestos en los que se presente una denuncia, protegiendo a todas las partes involucradas y defendiendo la indemnidad de la posible víctima y su asistencia por parte de la representación sindical en caso de así solicitarlo. Se establece asimismo la aplicación en caso necesario de medidas cautelares y que el proceso que en su caso se incoe respete los principios de respeto y protección a las personas, confidencialidad estricta y reserva de las actuaciones; diligencia y celeridad; imparcialidad y contradicción; restitución de las víctimas y la iniciación de un expediente sancionador en el supuesto de determinarse la posible comisión de un supuesto de este tipo de acoso.
Y ya que este artículo lo he comenzado con una cita, me gustaría finalizar con otra de la periodista que fue directora adjunta de El País, Soledad Gallego-Díaz que me hizo pensar en mi labor como director: Para combatir el antisemitismo no hace falta ser judío, como tampoco para luchar contra el racismo no hace falta ser negro. Lamentablemente, a veces parece que para combatir la discriminación de la mujer hace falta ser mujer.
Afortunadamente, en ENAIRE estamos trabajando para que todos luchemos por nuestros derechos, y abogamos por el principio de igualdad como razón de ser con independencia del cromosoma que tengan las personas.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial de la Mujer 2022.