Hasta hace poco la industria del videojuego tenía en su radar un montón de criticas o de atribuciones ligadas a malos hábitos, como pueden ser aislamiento o falta de contacto con la sociedad, dormir poco, comer mal, no hacer ejercicio… Ahora todo esto está cambiando. La industria del videojuego ha conseguido superar a las industrias de la música y el cine juntas y esto se debe a un contacto o una aceptación de la sociedad mainstream.
Una sociedad masiva que le ve nuevas posibilidades al mundo del videojuego donde no es incompatible jugar con estos productos y comer sano o hacer deporte y que, en lugar de aislar, fomentan la socialización en personas, que en otras ocasiones no tiene forma de mejorar aspectos por barreras físicas o de otro tipo. Pudiendo llegar a mejorar rasgos de su personalidad para una formación y un empleo, definidas hoy como habilidades blandas o soft skills.
Las habilidades blandas, a veces denominadas en español directamente con el término inglés soft skills, son una combinación de habilidades sociales, habilidades de comunicación, rasgos de la personalidad, actitudes, atributos profesionales, inteligencia social e inteligencia emocional, que facultan a las personas para moverse por su entorno, trabajar bien con otros, realizar un buen desempeño y, complementándose con las habilidades duras, o competencias convencionales, conseguir sus objetivos.
Las soft skills más valoradas en 2023 son: Capacidad para buscar soluciones, inteligencia emocional, adaptabilidad a los cambios, pensamiento crítico, gestión del tiempo, asertividad e intraemprendimiento.
Gracias a la llegada hace 4 años del periférico Xbox Adaptive Controller, se tuvo la oportunidad de comprender y demostrar que personas con discapacidad que nunca habían jugado a videojuegos o habían tenido que dejar de hacerlo por una discapacidad sobrevenida, podían jugar. Este tipo de soluciones les permiten acceder a la tecnología y poder compartir con otros sus experiencias, aprendizajes y entretenimiento, por que no olvidemos que los videojuegos pueden ser una importante oportunidad para mejorar la socialización, pero a veces son simplemente ocio, disfrute y diversión.
Dadas las evidencias sociales y de cambio que puso de manifiesto este periférico, desde la Fundación ONCE, se puso en marcha un plan estratégico en la industria del videojuego para personas con discapacidad con implantación en España y Latinoamérica. Este proyecto ha puesto distintas acciones en marcha en las cuatro líneas establecidas en el plan de estrategia:
– Formación y empleo: Es muy importante que las instituciones educativas ligadas a los videojuegos, así como los distintos agentes: publishers, estudios, prensa, comunicación, marketing e esports, empiecen a conocer las posibilidades de incluir en sus plantillas a personas con discapacidad. Por ello, se busca dotar de accesibilidad a los cursos en contenido y continente. En contenido, por ejemplo, en un curso de QA y testing para evaluar la accesibilidad, a parte de los bugs. Mientras que el continente es dotar a las formaciones de subtítulos, interprete de lengua de signos o accesibilidad documental.
– Accesibilidad: Trabajamos con los principales publishers de la industria a nivel nacional e internacional, con el objetivo de mejorar la accesibilidad de los productos que se están diseñando, tanto consolas, videojuegos triple A como videojuegos indies. Así también pusimos en marcha un catalogo de videojuegos accesibles con una metodología totalmente innovadora y creada por un equipo de profesionales y gamers en España, bajo la normativa europea EN 301549; con el objetivo de poder ofrecer a las personas con discapacidad toda la información necesaria antes de adquirir el videojuego. Esta parte se complementa con pruebas de usuario de periféricos y productos 3D, con temática de videojuegos.
– Sensibilización: Es importante que la sociedad general, normalice la discapacidad y entienda que es algo de todos y no solo de personas con barreras de distinto tipo. Por ello, en distintos eventos se realizan retos que quieren demostrar a personas con discapacidad que pueden jugar y a personas sin discapacidad que la accesibilidad también es para ellos. En 2023, también se pondrán en marcha distintos campamentos de verano para jóvenes.
– Esports: El mundo competitivo de los videojuegos, los esports mueven mucho hoy en día, haciendo que una sub-industria emerja, pero ¿cuál es el papel de las personas con discapacidad? Dentro del proyecto se están haciendo investigaciones que van desde el papel de las personas con discapacidad como jugadores, hasta las medidas de accesibilidad que se le ofrecen a la audiencia para disfrutar en igualdad de oportunidades de estas competiciones.
Finalmente, el proyecto cambió su nombre de videojuegos accesibles o inclusivos a Ga11y: Videojuegos accesibles, (pronunciado Galy). El proyecto está teniendo la oportunidad de coger notoriedad en países fuera de España como son: Francia, Argentina, Colombia o Brasil y existe la esperanza de que esto solo sea el principio de nuevas oportunidades que los jóvenes con y sin discapacidad del mundo tengan para crecer, incluirse y vivir su propia vida en las mejores condiciones.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Expo+Accesible 2023.