Cada año, cuando se acerca esta fecha, me pregunto a mí misma por qué sigue siendo tan necesaria la conmemoración de este día… Y es que, en España, el Día Internacional de la Mujer se celebró por primera vez en 1936, hace casi 100 años; sin embargo, su doble mensaje sigue siendo el mismo que cuando se inició: celebrar los logros sociales, económicos, culturales y políticos de las mujeres, pero también hacer un llamamiento a la acción para acelerar la paridad de género.
Por eso, el Día Internacional de la Mujer es para mí una jornada para reflexionar. Porque si bien es cierto que durante los últimos años hemos logrado avanzar mucho en empoderamiento femenino y reforzar la posición pública de las mujeres, todavía queda mucho camino por recorrer para lograr un mundo totalmente igualitario, libre de estereotipos y discriminación de género. Precisamente el tema escogido para celebrar el Día Internacional de la Mujer este 2022 es #BreakTheBias (Rompe los prejuicios), que pretende concienciar sobre los prejuicios, estereotipos y clichés que se arrastran desde hace mucho tiempo e impiden a las mujeres progresar y desarrollarse en numerosos ámbitos.
En este sentido, la autoestima, la ambición y las expectativas de las niñas y jóvenes son las primeras víctimas de los estereotipos de género. En mi propia experiencia como directora de Recursos Humanos, puedo asegurar que muchas veces las empresas encontramos una minoritaria presencia femenina a la hora de captar talentos en carreras relacionadas con el ámbito STEM. Por eso la educación es una de las principales vías para acabar con este sesgo. Es clave que las nuevas generaciones crezcan sin los estereotipos que perpetúan y limitan el rol de la mujer ya no solo al cuidado del hogar y de la familia, sino también a ciertas ramas profesionales o a posiciones de responsabilidad.
Desde las empresas es importante proporcionar referentes femeninos que puedan convertirse en fuente de inspiración para las mujeres del mañana. En el mundo laboral, los estereotipos de género tienen como resultado mantener a las mujeres en funciones subordinadas y contribuir a niveles bajos de liderazgo o dirección, educación y oportunidades de empleo.
En Henkel, creemos firmemente en la igualdad de género y somos conscientes de que es necesario responder ante estos prejuicios. Por eso fomentamos una cultura de inclusión que nos permite aprovechar la creatividad y la innovación y sacar el máximo partido a nuestros equipos. Estamos convencidos de que la diversidad juega un papel decisivo, y cuanto más diversos sean los equipos, más exitosa será nuestra organización. Por esta misma convicción contamos desde hace años con programas que garantizan la igualdad de acceso a las oportunidades laborales y a puestos de responsabilidad.
Por ejemplo, en Henkel Ibérica somos pioneros en la implementación de un Plan de Igualdad propio, puesto en marcha en 2008, y que contiene numerosas acciones para garantizar la igualdad de y conseguir un mayor equilibrio en la presencia de mujeres y hombres dentro de la empresa, tanto en el conjunto de la plantilla como en posiciones de liderazgo. Este Plan de Igualdad incluye medidas concretas de contratación, desarrollo y retención con las que se ha logrado que, actualmente, la plantilla total de Henkel Ibérica esté compuesta en un 39% de mujeres, y en los puestos de responsabilidad el porcentaje de mujeres supere ya el 44%.
En Henkel queremos ir todavía más allá y equilibrar aún más esta situación, por eso nos hemos fijado el objetivo de que en 2025 el 50% de los puestos directivos a nivel global estén ocupados por mujeres. Materializar este objetivo pone de manifiesto que lograr una igualdad de género real es un compromiso que no vamos a abandonar, y que seguiremos promoviendo no solo dentro de nuestra organización, sino también en la sociedad.
¡Feliz Día de la Mujer!
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial de la Mujer 2022.