Las ciudades constituyen el epicentro de la sociedad, pues en ellas se crean comunidades en las que las personas crecen y establecen vínculos tanto con los que le rodean como con el entorno urbano. En este sentido, y teniendo en cuenta que la actividad inmobiliaria impacta directamente en el desarrollo de las comunidades con las que opera, nuestro sector desempeña un papel fundamental a la hora de avanzar y adaptarse a las demandas de los residentes, así como de generar un impacto positivo, sostenible y duradero en el entorno para el futuro.
En línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, desde Metrovacesa trabajamos para crear ciudades que ofrezcan una alta calidad de vida a sus habitantes a la vez que respetan el medioambiente y la cohesión social. Un nuevo modelo de crecimiento urbano en el que maximizar la eficiencia de los recursos energéticos, fomentar la economía circular y respetar el entorno dependen también de que exista un modelo de sociedad capaz de gestionar de manera equilibrada los recursos naturales.
La educación, por tanto, es clave para conseguir un urbanismo sostenible a todos los niveles, concienciando a la ciudadanía desde todos los ámbitos y hacia todos los colectivos.
Para lograr construir una ciudad sostenible se necesita, por tanto, solventar una serie de aspectos que garanticen un equilibrio entre el desarrollo urbano, la calidad de vida de los habitantes y la preservación del medioambiente, basándose en una ciudad de principios ecológicos y de accesibilidad e igualdad para sus habitantes. Ante esta necesidad de promover un entorno respetuoso y habitable para todos, la industria inmobiliaria debe centrarse en priorizar el desarrollo de espacios accesibles, transitables y sostenibles, tanto ambiental como humanamente.
En esta línea, el urbanismo colaborativo es un concepto que gana cada vez más peso en el sector inmobiliario como una de las vías para lograr una construcción sostenible a todos los niveles, implicando a los ciudadanos en la toma de decisiones y fomentando el sentido de pertenencia y de responsabilidad en la construcción de su entorno. Para ello, es fundamental abrir canales de comunicación con la ciudadanía, como venimos haciendo en Metrovacesa, con el objetivo de dar a conocer nuestros proyectos con un lenguaje accesible y actividades adaptadas para hacerles partícipes en los avances.
En línea con nuestro compromiso, en Metrovacesa hemos creado el departamento de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS) que canaliza nuestras acciones de participación y comunicación, incorporando nuevos formatos, nuevas imágenes y nuevos espacios de encuentro para trasladar los conocimientos técnicos y complejos de la disciplina a los ciudadanos de a pie.
En este sentido, varios de nuestros proyectos cuentan ya con el apoyo de vecinos y entidades locales y su plena implicación durante todo el proceso, desde la gestión y el diseño hasta la ejecución y consolidación de nuevos desarrollos urbanos. De esta forma, conseguimos un mejor conocimiento de la realidad urbana y social donde se insertan nuestros proyectos, colaborando con los distintos grupos de interés en la fase de tramitación urbanística e integrando las mejores ideas, prácticas y soluciones al gran reto de la sostenibilidad urbana, con el fin de mejorar el entorno a nivel medioambiental, económico y humano.
No obstante, el camino hacia ciudades plenamente participativas y sostenibles no está exento de dificultades: la resistencia a los cambios en la planificación urbana, la falta de recursos y la necesidad de equilibrar intereses, a menudo divergentes, son algunos de los retos a los que se enfrenta el sector. En todo caso, gracias a la participación ciudadana se abren nuevas puertas a una mayor inclusión de la comunidad en la toma de decisiones y, sobre todo, se genera una cultura de la participación sostenible en el tiempo.
Este enfoque, además, no solo promueve la calidad de vida de los ciudadanos, sino también la viabilidad de los proyectos inmobiliarios a largo plazo, ya que fomenta la cohesión social y la participación activa de la comunidad en la planificación urbana.
Una adecuada pedagogía sobre urbanismo y sostenibilidad, unida a procesos participativos reales, es la mejor base para crear las ciudades del futuro; ciudades que solo podrán ser sostenibles si todos los agentes implicados cuentan con la formación adecuada y colaboran para alcanzar unas metas claras y definidas de forma conjunta.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Internacional de la Educación 2024.