Oxfam ha formado parte del movimiento global de Comercio Justo desde sus inicios. ¿Qué los llevó a asumir ese compromiso socialmente responsable y a establecer la alianza con Fairtrade Ibérica?
Oxfam en Gran Bretaña fue una de las primeras organizaciones que apostó por el Comercio Justo, no sólo como herramienta de cooperación, sino como movimiento. Así, participó activamente en la creación de redes nacionales e internacionales, como es el caso de Fairtrade. En el caso español, Oxfam Intermón comenzó su actividad de Comercio Justo en 1993 y también ha venido contribuyendo a estas redes. Oxfam Intermón es organización fundadora de Fairtrade Ibérica.
Para Oxfam, el Comercio Justo es una manera de contribuir a cuatro objetivos: oportunidades para personas desfavorecidas, sensibilización de consumidores y consumidoras, influencia en el sector privado y cuestionamiento de algunas normas del comercio internacional.
Vuestras tiendas físicas y online de Comercio Justo generan una parte relevante de vuestros ingresos. ¿Cómo han evolucionado las ventas a lo largo de los últimos años?
Aunque el Covid19 ha causado algunas turbulencias, sobre todo en 2020, lo cierto es que las tiendas físicas se mantienen en sus niveles de ventas desde hace varios años, lo cual es un buen resultado dada la tendencia general del pequeño comercio. La tienda virtual ha crecido significativamente y actualmente dobla las ventas de 2018.
¿Animaríais a otras organizaciones de vuestro sector a dar el paso y comercializar productos Fairtrade?
Realmente pensamos que el sector de las ONGs podría apostar más por comercializar productos y que estos fueran de Comercio Justo. Es una manera de facilitar la colaboración de la ciudadanía con las organizaciones y también de renovar las propuestas. Si se tratara de productos certificables por Fairtrade, sin duda que ésta sería la manera más efectiva de hacerlo.
¿De qué manera creéis que las buenas prácticas derivadas del Comercio Justo están aportando en la lucha contra el cambio climático y contra las desigualdades sociales a nivel global?
El movimiento de Comercio Justo es pionero en hacer de las prácticas de consumo una manera de influir en cuestiones sociales y medioambientales. Actualmente, esa influencia se libra en torno al cambio climático, pero también se sigue librando en desigualdades sociales que si bien han evolucionado en algunos contexto, siguen siendo realidades de extrema preocupación. Es muy importante que el Comercio Justo sepa ir adaptándose a esas evoluciones y pueda así ser percibido por los consumidores y las consumidoras como una forma efectiva de cambio.
¿Cuáles son vuestros próximos retos y desafíos como organización social en materia de sostenibilidad?
Para Oxfam, sostenibilidad es un término integral. Trabajar de forma sostenible es hacerlo sin comprometer el futuro, tanto ecológica como socialmente. En este sentido, nos estamos marcando retos en tres líneas: acompañar a los grupos productores para que aumente el impacto de nuestras compras en términos sociales y medioambientales, demostrar que nuestra actividad es neutra en emisiones de CO2, y adaptar estas formas de trabajo con organizaciones productoras en España.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: Comunidad Fairtrade