¿De qué manera está integrando la organización los Objetivos de Desarrollo en su empresa y qué medidas están implementando para que esto se logre?
En cuanto a energía como bien o como servicio, sobre el enfoque energético, primero que nada, en cuanto a concientización, hablamos sobre el impacto ambiental aplicado en la generación de energía. Desde ese enfoque lo primero que contamos es que cerca del 80% de nuestros consumos energéticos están hechos a base de gas, carbón y petróleo.
Esto es algo que la gente desconoce. Esto es una marca sustentable, debido a que esta gran energía aparece debido a estos combustibles fósiles no renovables y también el hecho de que reducimos nuestros consumos, por lo que le damos un enfoque primario a la eficiencia de esto, ya que no sirve usar ningún tipo de energía si no existe un uso racional, puesto que lógicamente todo está ligado en este impacto ambiental. Entonces, buscamos que este impacto ambiental sea reducido o si es posible nulo. También, hacemos hincapié en la eficiencia energética. Existe una cuestión fundamental sobre la conciencia del costo energético, ambiental y social sobre la generación de energía, todo mejorará sobre sus acciones. Todo esto es conciencia sobre el consumo energético.
¿De qué manera ser consciente sobre el consumo energético te lleva a pensar acerca del consumo responsable en las sociedades de una manera similar?
A algunas personas les llama la atención más lo ambiental, a otras lo económico y a otras más lo social. En algunas cosas, que es lo que trato de difundir yo, se encuentran los tres factores, puesto que la energía energética cuida tu bolsilla y trata de reducir impactos. La realidad es que uno tiene que hablar de los tres ejes, puesto que la gente está motivada por distintas cosas. Hay que entender que planeta o ecosistema hay uno solo y es vital entender y trabajar por los tres ejes en forma de ver proyectos a largo plazo. Estamos hablando de algo, además, que nos beneficia a todos.
¿Consideras que el público argentino es consciente de sus consumos?
No es un público muy consciente de sus consumos, en general. En el interior del país, dejando de lado todo lo que respecta a Buenos Aires, si son más cuidadosos por sus consumos, mientras que en la capital no lo son. Ahora, tampoco existe el conocimiento de qué o cuánto se gasta es muy claro, pero si se maneja de una mejor manera en provincias. Sin embargo, hoy en día en Buenos Aires, existe un cambio cultural debido a que el consumo y precios suben y por ende, su comportamiento acerca de los excesos. En cuanto a pequeña y mediana empresa, esto está tratando de cambiar.
Desde tu punto de vista, ¿qué organizaciones están tratando de cambiar acerca del consumo en Argentina?
Bueno, el gobiernos desde luego. Desde el ministerio, donde tienen programas de escalas nacional, lo cual hay que reconocer. Además, otros organismos que se enfocan en electrodomésticos y su consumo masivo, como lavarropas, microondas o lámparas. También, existen ONG y empresas que están comenzando a invertir en programas, consultorías y tecnología sobre consumo energético. Existen otros organismos que se basan solo en producción en general.
Siguiendo la misma línea sobre la empresa y lo que promueve ¿Cuáles crees que son las desventajas de formar parte de una empresa como esta con esos lineamientos? ¿Crees que los principios del pacto mundial aplican para la gestión de su negocio?
Depende. Creo que una desventaja es que otras empresas ven estos temas como una cuestión de marketing. Ya que marca un beneficio ser una empresa B corp. Pensar esto como más a largo plazo e intentar llegar a serlo, porque es difícil que todas las empresas del mercado puedan. Eso sí está claro. Por otro lado, creo que el sistema B te plantea como debe ser tu modelo de negocio y lo que deseas seguir.
¿Qué recomendación, desde tu perspectiva, le darías a nuestros lectores?
Es primordial darse cuenta en qué están gastando energía. Es una manera de empaparse del tema y como la energía se gasta y se consume. Fundamentalmente debe ser esto.