¿Cómo valora el trabajo del Consejo de Responsabilidad Social para el Desarrollo Sostenible?
El Consejo de Responsabilidad Social para el Desarrollo Sostenible ha cumplido un rol clave aunando conocimiento y coordinación multisectorial para desarrollar políticas de Estado que contribuyan a mejorar las prácticas del sector público y privado, impulsando la adopción de una gestión socialmente responsable. Después de dos años de intenso trabajo, con un cambio de gobierno entre medio, que demuestra que el desarrollo sostenible es un tema de Estado, en abril de 2015 se presentó el Plan de Acción Nacional para el periodo 2015-2018, el cual se enfoca en 17 medidas prioritarias. Una de las primeras en implementarse dice relación con el fortalecimiento de los estándares de gobiernos corporativos y la transparencia de la información, lo cual si bien se viene gestando desde el 2014 cobra total relevancia en el presente año dado el contexto de escándalos financieros que han implicado al sector privado con el político.
¿Qué pasos se han dado para la mejora del gobierno corporativo y la transparencia?
La Superintendencia de Valores y Seguros decidió liderar este proceso, estableciendo la necesidad de generar cambios a la normativa sobre gobiernos corporativos. Entre el 2 de marzo y el 3 de abril se llevó a cabo una consulta pública al informe denominado Fortalecimiento de Estándares de Gobierno Corporativo de las Sociedades Anónimas Abiertas, que aborda perfeccionamientos a la Norma de Carácter General NCG N°341 y algunos ajustes a la NCG N°30.
A través de estas normas actualizadas, vigentes a contar de mayo de 2015, se busca mejorar la información que reportan las sociedades anónimas abiertas del mercado local en materias de gobierno corporativo e incorporar la difusión de prácticas relacionadas con Responsabilidad Social y Desarrollo Sostenible. Aunque la adopción de estas prácticas no es obligatoria, se utilizará el mecanismo de ‘cumplir o explicar’, de modo que las empresas no sólo se limiten a cumplir con aspectos formales sino que demuestren con hechos concretos la adopción de prácticas socialmente responsables. Con esto se acelerará la adopción de Reportes de Sostenibilidad como instrumento de transparencia y rendición de cuentas.
Como una señal de consistencia estatal, se promoverá el desarrollo de Reportes de Sostenibilidad en empresas del Estado y organizaciones públicas.
En 2014 fue nombrado asesor especial del Pacto Global de Naciones Unidas para América Latina en el ámbito de las Políticas Públicas. ¿Qué aspectos de mejora observa en el pasado año en la RSE en América Latina? ¿Qué hitos destacaría?
A través de mi rol he buscado apoyar a los países de la región a articular una agenda país y a conformar la institucionalidad pública en materia de Sostenibilidad, en coherencia con los compromisos y adhesiones internacionales que los Estados Latinoamericanos han suscrito en materia de Sostenibilidad. Se ha ido avanzando, tomando como referencia la experiencia de Chile en la conformación del Consejo de Responsabilidad Social para el Desarrollo Sostenible, como una instancia eficaz para generar los cambios que el país necesita para avanzar hacia un desarrollo sostenible y, al mismo tiempo, responder al compromiso de generar planes de acción nacionales establecido en la Cumbre Río + 20 de Naciones Unidas de 2012 y reafirmado en la Cumbre CELAC UE del año siguiente.
También se observa una mayor conciencia sobre la necesidad de articular la agenda pública y privada con miras a definir las prioridades mundiales, razón por la cual se ha generado un movimiento tendiente a masificar el conocimiento y la adhesión a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, como medidas concretas Post 2015.
En 2015 se cumplía el plazo de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. ¿Qué balance hace y cómo debe enfocarse el escenario post 2015?
La responsabilidad de los Objetivos de Desarrollo del Milenio estaba enfocada únicamente en los Estados, mientras que los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que corresponden a la agenda post 2015 de las Naciones Unidas, se hacen extensivos a las empresas. Esto porque quedó demostrado que para abordar las prioridades mundiales, como el cambio climático, el agua, la comida, la igualdad, trabajo decente y educación, se requiere de un esfuerzo conjunto y sostenido en el tiempo, ya que se trata de desafíos fundamentales para el presente y futuro de nuestra humanidad.
En Europa, 2014 estuvo marcado por una nueva directiva que obliga a las empresas a reportar información no financiera. ¿Cree que en América Latina o en Chile es necesaria una iniciativa similar?¿Es partidario de obligar a las organizaciones a reportar asuntos extrafinancieros?
Es una de las 17 medidas del Plan de Acción Nacional del Consejo de Responsabilidad Social. Si bien no es una medida obligatoria, el que se solicite reportar o explicar sobre aspectos sociales y ambientales, es un claro incentivo para transparentar y rendir cuentas. Con esto la Superintendencia de Valores y Seguros busca que se generen los incentivos para que los inversionistas tomen sus decisiones de inversión privilegiando aquellas sociedades en que sus intereses estén mejor resguardados, sin perjuicio de los riesgos propios asociados a las actividades o giros de negocios que desarrolle la sociedad.
¿Cómo cree que ha evolucionado la RSE en esta última década en Chile? ¿Cómo ha vivido esta evolución personal y profesionalmente?
Hemos transitado de una amplia variedad de definiciones sobre Responsabilidad Social a su normalización con la publicación en 2010 de la Norma ISO 26000, que permitió contar con una definición consensuada a nivel global y altamente legitima. Esta misma evolución, responde al grado de madurez que fue adquiriendo el tema en las organizaciones. Si hace diez años se hablaba de RSE, hoy es claro que la E está de más, porque es un enfoque de gestión que aplicaba a todo tipo de organizaciones. En el Centro Vincular PUCV hemos sido testigos y protagonistas de estos cambios, puesto que hemos participado en todas las instancias normativas y grupos experto a nivel internacional en materia de Sostenibilidad, aportado con nuestra experiencia práctica en diversos sectores económicos.
En los últimos años hemos venido apoyando el diseño y desarrollo de políticas públicas claves para generar las transformaciones vitales que requiere el país. Hoy vemos los resultados de este esfuerzo, lo cual es altamente satisfactorio para nuestro equipo. Los desafíos son cada vez más grandes, pero tenemos la convicción de que debemos seguir en esta senda.
Finalmente, háblenos de la labor de Vincular. ¿Qué logros destacaría logros y retos destacaría?
Nuestra gran diferenciación y foco sigue siendo aportar al desarrollo e implementación de la sostenibilidad a nivel de las políticas públicas tanto en Chile como en Latinoamérica, aportando a la articulación de una agenda país, que establezca coherencia con nuestros compromisos y adhesiones internacionales. Del mismo modo, seguiremos aportando a la formación e instalación de competencias en la materia, a través de nuestro Diplomado en Gestión Estratégica de Sostenibilidad, que este 2015 cumplió su vigésima primera versión en Chile, consolidándose como uno de los programas pioneros y más maduros a nivel universitario en materia de Sostenibilidad. Este Diplomado será replicado en Costa Rica (AED con patrocinio de SIECA), en El Salvador (Fundemás) y posiblemente en Panamá, así como a través de una parrilla de cursos más técnicos dictados en Colombia, donde contamos con un equipo estable de consultores.