Bentley ha lanzado el Continental GT Speed, su primer vehículo impulsado por eFuel, como parte de su plan para minimizar las emisiones contaminantes. Este eFuel, desarrollado en colaboración con Porsche en la planta piloto Haru Oni en Chile, utiliza dióxido de carbono biogénico capturado durante el proceso de fabricación de cerveza, el cual se combina con hidrógeno obtenido por electrólisis del agua para crear metanol, que luego se convierte en gasolina.
La fórmula probada por Bentley es una mezcla de eFuel al 75% con un 25% de gasolina convencional. Este combustible sintético busca neutralizar las emisiones de CO2, igualando la cantidad generada durante su combustión con la necesaria para su producción, acercándose a un modelo energético más sostenible.
La planta chilena tiene como meta producir 100.000 litros de eFuel anuales, mientras que Bentley continúa investigando otras alternativas, como biocombustibles y eFuels, como parte de su transición hacia la electrificación total. Todos los vehículos de la marca ya pueden operar con combustibles renovables, alineándose con su visión de sostenibilidad a largo plazo.
El Continental GT Speed, probado con este combustible, es una versión modernizada del clásico, ofreciendo 782 caballos de potencia, 1.000 Nm de par motor y una autonomía eléctrica de 80 kilómetros, con emisiones de carbono por debajo de 50 gramos por kilómetro. Además, Bentley está por fabricar el vehículo número 100.000 de esta línea en su fábrica artesanal en Crewe, Inglaterra, a principios del próximo año.
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