Esta realidad exige una correcta adaptación a los cambios tanto de las empresas como de las familias. La generación de un mayor conflicto entre ambas hace muy necesario enfocarse en la conciliación trabajo y familia. Para estudiar los efectos que han tenido estos cambios en la sociedad chilena es que el ESE Business School, con el apoyo del Grupo Security, creó el Centro Trabajo y Familia. En el Centro nos preocupamos de investigar, medir y difundir los impactos de la integración entre la vida familiar, laboral y personal.
Durante el último año realizamos un estudio enfocado en la conciliación trabajo y familia en Chile. El objetivo era medir el nivel de Responsabilidad Familiar Corporativa (RFC) de las empresas. La RFC es la preocupación y creación de entornos laborales que faciliten la integración de la vida familiar y laboral, para así tener un impacto tanto en los individuos y sus familias como en la organización.
Para medir los entornos laborales de las empresas utilizamos la metodología IFREI (IESE Family Responsible Employer Index) desarrollada por el ICWF (International Center of Work and Family) del IESE. Este estudio se realizó en Chile y en otros 19 países, lo que permitió comparar los resultados nacionales con Latinoamérica y el mundo.
Los entornos laborales se construyen en base a las políticas, el liderazgo y la cultura de la organización. Cada una de estas dimensiones tiene varios indicadores. Luego comparamos cómo los diferentes entornos impactan en resultados a nivel individual y organizacional.
Lamentablemente los resultados de Chile, Latinoamérica y el mundo nos muestran que en su mayoría los entornos laborales dificultan la conciliación trabajo y familia. En Chile, un 62% de las personas encuestadas considera que sus entornos laborales obstaculizan la conciliación entre trabajo y familia. Si comparamos los resultados con los medidos a través de la misma metodología durante el 2010, podemos ver que la realidad chilena ha empeorado. En ese entonces un 58% de los encuestados consideraba que sus entornos laborales dificultaban la conciliación.
Algunos de los resultados a nivel de políticas RFC son por ejemplo que las políticas más usadas así como las consideradas más útiles por los chilenos son políticas de flexibilidad de tiempo y espacio, y de beneficios para el colaborador. Los resultados de la dimensión de liderazgo nos muestran que menos del 50% de las personas evalúa a su supervisor cómo un líder RFC o sea un líder con e que pueden hablar y solucionar temas relacionados con la conciliación trabajo y familia. A nivel de cultura, un 80% de las personas encuestadas considera que existen consecuencias negativas para su carrera a causa de comportamientos RFC, que son por ejemplo utilizar las políticas de flexibilidad ofrecidas por las organizaciones.
Por otra parte, podemos ver que entornos que fomenten la integración entre la vida laboral y familiar impactan positivamente en indicadores individuales y organizacionales. Por ejemplo, personas que se encuentran en entornos que facilitan la conciliación trabajo y familia, perciben su salud general un 19% mejor que personas que se encuentran en entornos que dificultan la conciliación trabajo y familia. Esta misma relación se da en otros indicadores, por ejemplo la diferencia en la percepción de apoyo de la organización entre estos dos grupos es del 60% y la de satisfacción con el equilibrio trabajo y familia es de un 92%.
En Chile tenemos una gran oportunidad para desarrollar la Responsabilidad Familiar Corporativa en nuestras organizaciones. Las personas somos parte de familias y empresas, pero también somos los mismos que construimos la sociedad en que vivimos. Personas que logran equilibrar la vida familiar y laboral, no solo se verán beneficiadas individualmente, sino que construirán sociedades sanas y sostenibles, que es lo que Chile necesita para su buen desarrollo futuro.