La Cámara Colombo Americana (AmCham Colombia) y CAF – Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe firmaron un memorando de entendimiento con el fin de fomentar el crecimiento económico sostenible y la creación de empleo en Colombia. Este acuerdo se alinea con los objetivos del “Pacto por las Oportunidades”, que involucra a casi 500 empresas comprometidas con la generación de empleo y el desarrollo social. María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, destacó que la colaboración impulsará especialmente a las microempresas, que representan el 70% del Pacto. El acuerdo incluirá asesoría y capacitación para mejorar los procesos de exportación de las pequeñas y medianas empresas, especialmente hacia mercados internacionales como Estados Unidos. Además, se enfocará en crear espacios comerciales, promover la inclusión laboral de poblaciones históricamente excluidas y fomentar prácticas socioambientales sostenibles. Como subrayó Sergio Díaz-Granados, presidente de CAF, esta alianza busca fortalecer el comercio y la diversificación exportadora, con un enfoque en poner a las personas en el centro de los beneficios.
Conozca algunas de las tendencias tecnológicas que marcaran el 2025
En 2025, se espera que varias tendencias tecnológicas transformen la vida diaria y el entorno urbano, enfocándose en la sostenibilidad y la conectividad. La evolución de los hogares inteligentes permitirá que dispositivos como neveras y aires acondicionados optimicen su consumo energético, creando un entorno más eficiente y sostenible. La inteligencia artificial (IA) continuará siendo fundamental, ofreciendo experiencias personalizadas adaptadas a las rutinas de los usuarios, mientras se avanza en su gobernanza ética y responsable. En el ámbito de la movilidad, los vehículos eléctricos y scooters inteligentes ganarán terreno como alternativas ecológicas al transporte tradicional, contribuyendo a la reducción de emisiones. Además, la computación sostenible buscará disminuir la huella de carbono de dispositivos tecnológicos, promoviendo un uso más eficiente de los recursos. Empresas como Xiaomi están implementando tecnologías energéticamente eficientes, alineadas con los principios de sostenibilidad. En conjunto, estas tendencias reflejan un compromiso por desarrollar un futuro interconectado y responsable, donde la innovación tecnológica se combine con la preservación del medio ambiente.
Xiaomi revela las tendencias tecnológicas que transformarán el 2025
Xiaomi ha identificado las tendencias tecnológicas que dominarán el 2025, destacando la importancia de un ecosistema interconectado, sostenible y centrado en la calidad de vida. Según Juliana Suárez, PR Manager de Xiaomi en Colombia, “la tecnología se enfocará más que nunca en conectar a las personas con un ecosistema más eficiente, sostenible y centrado en mejorar su calidad de vida”. En este contexto, Xiaomi lidera la innovación en hogares inteligentes mediante su sistema operativo HyperOS, que permite la interconexión de dispositivos para optimizar el consumo energético y promover una vida más ecológica. Además, la inteligencia artificial (IA) será clave para personalizar la experiencia del usuario, adaptándose a sus rutinas y preferencias. La empresa también destaca en la movilidad sostenible con soluciones como scooters eléctricos, que combinan eficiencia, conectividad y un diseño práctico para facilitar la movilidad urbana, además de vehículos eléctricos como la serie SU7. Xiaomi también está comprometida con la computación sostenible, implementando tecnologías que reducen la huella de carbono y optimizan el uso de recursos, garantizando productos más duraderos y responsables con el medio ambiente. En conjunto, estas tendencias reflejan un futuro conectado y respetuoso con el planeta, donde la tecnología no solo facilita la vida, sino que también contribuye a un mundo más sostenible.
Jaime Arteaga y Asociados se transforma en Arteaga; Un nuevo capítulo para el desarrollo sostenible en América Latina
Jaime Arteaga y Asociados anuncia su rebranding a Arteaga, con el objetivo de consolidar su expansión en América Latina y ampliar su presencia en mercados internacionales como Estados Unidos y Ecuador. Este cambio no solo implica un nuevo nombre, sino una transformación estratégica que refleja su compromiso renovado con el desarrollo sostenible en la región. Según Jaime Arteaga de Brigard, fundador y director ejecutivo, “este paso refleja nuestra ambición de contribuir de manera decisiva al desarrollo sostenible de América Latina”. La firma, que ha operado en más de diez países desde su fundación en 2013, busca fortalecer su enfoque en la simplicidad, internacionalización e innovación, con el objetivo de ofrecer soluciones personalizadas y generar valor compartido entre los sectores público y privado. Arteaga aspira a seguir siendo un aliado estratégico para el bienestar de las comunidades, destacando su trabajo en sectores clave como la industria extractiva y el desarrollo territorial.
El poder transformador de la publicidad sostenible
En un entorno de creciente conciencia sobre los impactos ambientales y sociales, la publicidad sostenible emerge como una necesidad crítica. Estefanía Pulido García, en su reflexión, destaca que las marcas deben asegurar la coherencia entre lo que comunican y lo que realmente hacen, evitando prácticas como el greenwashing y el greenhushing, que socavan la confianza del consumidor. La publicidad, como herramienta de persuasión, tiene el poder de influir en el comportamiento colectivo, y debe alinearse con la sostenibilidad no solo como estrategia, sino como un principio ético fundamental. “La publicidad sostenible no debe ser un accesorio, sino parte del ADN de las marcas”, subraya Pulido. En este sentido, la industria creativa tiene el reto de equilibrar la necesidad comercial con el compromiso ambiental, educando a los equipos en sostenibilidad y creando mensajes que no solo vendan, sino que transformen. La publicidad tiene el potencial de redirigir el futuro de manera ética y responsable, y su éxito no debe medirse solo por el beneficio económico, sino por el legado positivo que deja.
Autopartistas, en alerta por proyecto de decreto que sube aranceles 10%
Asopartes ha expresado su preocupación por un proyecto de decreto propuesto por los ministerios de Hacienda y Comercio, que incrementaría en un 10% los aranceles a vehículos, autopartes, motopartes y bicicletas. A pesar de que la medida se enmarca dentro de la Política Nacional de reindustrialización, el gremio considera que tendría efectos negativos en la industria automotriz y sectores clave como el transporte de carga y público. Entre los impactos más destacados, se encuentran el aumento de los costos operativos en el transporte, el desincentivo a la formalización del mercado, el riesgo de aumentar el mercado informal de autopartes de baja calidad, y la carga económica adicional para los consumidores. Asopartes ha solicitado al Gobierno un diálogo para encontrar alternativas que promuevan la sostenibilidad, la competitividad y el bienestar de los colombianos, proponiendo incentivos fiscales y medidas arancelarias que equilibren los objetivos de reindustrialización y desarrollo económico inclusivo.
“Ningún país da nada gratis”: Lucas Buitrago
Lucas Buitrago, coordinador de sostenibilidad y finanzas en WCS Colombia, compartió su perspectiva sobre los desafíos en la obtención de financiación para proyectos de conservación ambiental en Colombia. Su interés por la economía aplicada y la sostenibilidad lo llevó a involucrarse en el tema de las regalías ambientales, promoviendo el reconocimiento a quienes aportan a la conservación. En su opinión, la conservación debe involucrar no solo la preservación de los recursos naturales, sino también la restauración y el uso sostenible de estos. La medición de los impactos de los proyectos se realiza a través de estadísticas y comparaciones antes y después de las intervenciones. En cuanto a la financiación, destaca que los recursos naturales son de todos, pero la responsabilidad de su conservación no está clara, ya que compite con otras prioridades económicas. Aunque Colombia recibe fondos internacionales de países como Alemania, Estados Unidos y la UE, también enfrenta el reto de evitar el “greenwashing” y asegurar que los fondos se utilicen de manera genuina para la sostenibilidad.