Incauca, la principal cogeneradora de energía en Colombia, ha dado un paso decisivo hacia la sostenibilidad y la modernización agrícola al eliminar la quema de caña y adoptar una cosecha 100% mecanizada, marcando un cambio radical en las prácticas tradicionales del sector. “Este es un compromiso con el futuro del país y el medio ambiente”, expresó José Leudin Giraldo, gerente de cosecha de Incauca. La quema, que se utilizaba para facilitar el corte manual de la caña, generaba efectos negativos en la calidad del aire y afectaba las comunidades cercanas. Con la nueva tecnología, Incauca no solo contribuye a la protección ambiental, sino que también mejora la seguridad laboral y la eficiencia en la producción.
Este cambio está alineado con los objetivos establecidos por Asocaña para alcanzar el 100% de corte verde para 2030, un hito que Incauca ya ha logrado. La transición hacia la mecanización ha dado lugar a nuevas oportunidades laborales, destacando la capacitación de casi 1.000 trabajadores, incluidos programas como Mujeres Cosechando Futuro, que ha entrenado a 28 mujeres en el manejo de maquinaria de última generación. De estas, 16 ya forman parte de la fuerza laboral de Incauca, lo que refleja un avance significativo hacia la inclusión de género en un sector históricamente dominado por hombres.
La historia de José Omar Robayo, quien después de 25 años como cortero de caña ahora trabaja en labores más técnicas, ejemplifica el impacto positivo de esta transición. “Gracias a la capacitación y al apoyo de Incauca, no solo mejoré mi situación laboral, sino que también pude ofrecer un futuro mejor a mi familia”, comentó Robayo. Esta modernización no solo mejora la productividad de la empresa, sino que también empodera a la comunidad local, creando un círculo virtuoso de sostenibilidad y desarrollo social.
Con este avance, Incauca no solo refuerza su compromiso con la sostenibilidad, sino que se posiciona como un referente en el sector agroindustrial, demostrando que la innovación y la responsabilidad ambiental pueden ir de la mano, transformando tanto el panorama laboral como el medioambiental.
