A medida que la población mundial crece, son mayores los desafíos que debe enfrentar en un contexto de crisis climática y alimentaria, por lo cual iniciativas como The Hunger Project, a través de la cual cada 28 de mayo se conmemora el Día Mundial contra el Hambre (World Hunger Day), se hacen tan relevantes para mitigar las consecuencias de estas crisis.
The Hunger Project busca crear conciencia sobre la importancia de erradicar el hambre en el mundo y promover soluciones sostenibles para garantizar la seguridad alimentaria. A través de la educación, la movilización social y el apoyo a proyectos de desarrollo comunitario, se impulsa la participación de las comunidades en la búsqueda de soluciones para superar la pobreza y el hambre. Esta iniciativa se conecta directamente con los principios de soberanía alimentaria y el derecho de los pueblos a definir sus políticas agrarias y alimentarias, enfatizando la importancia de empoderar a las comunidades locales en la lucha contra el hambre.
El concepto de soberanía alimentaria fue llevado al debate público por vía Campesina con ocasión de la Cumbre Mundial de la Alimentación en 1996 como alternativa a las políticas neoliberales. El Directorio Ecológico y Natural Vía Campesina indicó que la soberanía alimentaria es el Derecho de los pueblos, de sus Países o Uniones de Estados a definir su política agraria y alimentaria, sin dumping frente a países terceros.
Al priorizar la producción agrícola local, el acceso de los campesinos y las campesinas y de las personas a la tierra, al agua, a las semillas y al crédito, se aporta a la producción alimentaria sostenible. De ahí la necesidad de implementar, estrategias, acciones y políticas públicas que tengan en cuenta el derecho del campesinado a producir alimentos y el derecho de los consumidores a poder decidir lo que quieren consumir, cómo y quién lo produce, además de fortalecer las cadenas de valor de los productos agrícolas, el consumo de productos locales y el reconocimiento de alimentos que permitan diversificar de manera sostenible las formas de alimentación.
La realidad y especificidad de los alimentos como un ‘bien’ diferente a los demás y el hecho de que la comida podría faltar aun cuando se disponga del dinero para comprarla, hizo que en 1974 la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) realizara la cumbre sobre la alimentación. De acuerdo con la FAO, ese fue un año de escasez de alimentos no solo por los costos, sino también por las condiciones meteorológicas que impactaron en la producción, el aumento de la demanda, entre otros.
Con fundamento en el anterior reconocimiento, cada uno de los países de las Naciones Unidas promovieron la adopción de políticas y normas que buscaran la concreción del citado derecho y contribuyeran en la lucha contra el hambre.
Por su parte, Colombia estableció en su artículo 44 de la Constitución Política que todos los niños tienen el derecho fundamental a una alimentación nutritiva y equilibrada, entre otros derechos, como estrategia para garantizar su desarrollo armónico e integral, asimismo, los artículos 64, 65 y 66 regulan la oferta y la producción agrícola, en la que indudablemente se concreta la obligación del Estado en la materia para garantizar la alimentación de la población colombiana.
Ahora bien, para dar cumplimiento a sus obligaciones en relación con el derecho a la alimentación, se acogió el Conpes 113 de 2008, el cual adoptó la Política Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (PSAN) y en ella se establece el concepto de seguridad alimentaria y nutricional (SAN).
Finalmente, en línea con el compromiso global para abordar el desafío del hambre, es crucial destacar el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 2: Hambre Cero. Este objetivo establecido por las Naciones Unidas busca poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover la agricultura sostenible, donde la soberanía alimentaria emerge como un camino clave para avanzar hacia el logro del ODS 2 y construir un mundo más justo y equitativo en términos de acceso a la alimentación.
Como sociedad, debemos trabajar en esas tareas.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial del Hambre, en colaboración con The Hunger Project México.