La Asociación de Snacks es una organización sin ánimo de lucro, fundada en 1978, que representa a las principales empresas elaboradoras de patatas fritas, snacks, frutos secos, semillas y frutas desecadas
La Asociación de Snacks impulsa y vela por la responsabilidad del sector con el entorno, promoviendo la distribución de la riqueza en toda la cadena de valor. De esta forma, se contribuye al equilibrio económico, social y medioambiental.
En la actualidad, la Asociación cuenta con una representatividad cercana al 80% de la cuota de mercado del sector en la categoría de snacks y de casi un 60% en frutos secos. Está integrada por las empresas Aperitivos Medina, Chavez y Clark, Cumba, Facundo Blanco, Frit Ravich, Grefusa, Grupo Apex, Europe Snacks, Importaco, La Abuela Nieves, Leng-D’or, Liven, Patatas Fritas Torres, Pepsico Foods, Risi, Rubio Snacks, y Tostados y Fritos (Tosfrit).
¿De qué modo el sector de SNACKS apuesta por las buenas prácticas socialmente responsables?
Las empresas del sector de snacks tienen, entre sus objetivos corporativos, la implantación y mantenimiento de un modelo de negocio sostenible en el tiempo, tratando de generar un impacto positivo en cada una de las fases del proceso productivo, en línea con la Estrategia Farm to Fork de la Unión Europea: materias primas y aprovisionamiento, procesamiento y fabricación, distribución y logística, comercialización y gestión de residuos.
Los principales ejes de actuación en cada una de las fases son el ambiental y el desarrollo social y económico. En este sentido, han venido incorporando los ODS 2030 en sus respectivas agendas corporativas, desarrollando acciones de sensibilización tanto internas como dirigidas a los principales grupos de interés, convirtiéndose en una herramienta de mejora continua y definiendo indicadores para todos los departamentos de las empresas.
¿Nos puedes explicar brevemente vuestra evolución hasta la actualidad?
El sector de snacks y productos de aperitivo tiene un estrecho vínculo con el entorno rural para el aprovisionamiento de las materias primas, por lo que, desde hace décadas, ha tenido entre sus prioridades el desarrollo y aplicación de prácticas de cultivo eficientes y sostenibles, y en la promoción del desarrollo económico de los entornos locales en los que están presentes.
Por otro lado, en la fase productiva, los fabricantes han venido trabajando en la implantación de sistemas de ahorro energético y de agua. A nivel de distribución y la logística, el sector ya lleva años analizando y aplicando sistemas de transporte que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero.
Otra de las prioridades de los fabricantes snacks se viene orientando a optimizar los perfiles nutricionales de los productos de aperitivo y a incorporar nuevas materias primas que respondan a las distintas necesidades y prioridades del consumidor. En esta línea, el sector es pionero en la aplicación (desde 2005) de planes de reducción de sal y grasas, en colaboración con las autoridades sanitarias (aunque los snacks sólo aportan un 2% a la ingesta media de sal en España y un 1,1% de la ingesta total de lípidos) y en la aplicación de iniciativas de autocontrol publicitario para menores y la promoción de hábitos saludables.
En los últimos años, junto con estas prácticas, el sector ha venido promoviendo la investigación y desarrollo de tecnologías que permitan la incorporación de materiales reciclados, reciclables, compostables o biodegradables en el envasado de los productos, con la consecuente racionalización en el uso de plásticos.
Además, el desarrollo de planes de digitalización en los últimos años ha permitido a las empresas del sector de snacks reducir drásticamente el desperdicio alimentario, a través, por ejemplo, de la valorización de subproductos para la elaboración de alimentos para animales, el control de caducidades, el ajuste de previsiones de ventas o el uso de los residuos de aceites vegetales para la producción de biodiesel. Estas iniciativas demuestran la firme apuesta del sector de snacks con los fundamentos de la industria 4.0, la merma 0 y la economía circular para reducir el derroche alimentario.
¿Y alguna buena práctica en concreto con los objetivos que persigue que te gustaría destacar en esta entrevista?
Las empresas fabricantes de snacks tienen un vínculo muy estrecho con los entornos locales en los que desarrollan su actividad. En este sentido, y entre las distintas iniciativas que el sector viene desarrollando en materia de sostenibilidad, podemos destacar las colaboraciones que vienen manteniendo con organizaciones nacionales y locales para ayudar a los colectivos especialmente vulnerables (a través de entidades como Cruz Roja, UNICEF o la Federación Española de Bancos de Alimentos) y las distintas acciones orientadas a promover el emprendimiento femenino en los entornos rurales (en colaboración con instituciones como FADEMUR, la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales).
Además, las empresas del sector de snacks vienen desarrollando diversas iniciativas que impacten en materia de igualdad de género, diversidad e inclusión de colectivos con dificultades de acceso al mercado laboral.
Por otro lado, otra de las buenas prácticas destacables del sector es la referida a las múltiples iniciativas que las empresas vienen implantando para reducir su huella de carbono, mediante la generalización del uso de placas solares y fotovoltaicas en sus procesos productivos y con la potenciación del uso de vehículos eléctricos, híbridos o de Gas Licuado en la logística, tanto en proximidad como en lejanía.
Y, por supuesto, estamos especialmente orgullosos de ser uno de los sectores pioneros en la implantación de envases compostables y biodegradables dentro de la industria alimentaria, un logro de especial relevancia teniendo en cuenta las especiales condiciones de conservación que requieren nuestros productos.
¿Qué importancia tiene para vuestra organización formar parte de FIAB a la hora de mejorar vuestra RSC?
Ser parte de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas nos permite, por un lado, enfocar nuestras iniciativas de acuerdo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. De esta forma, podemos ayudar a nuestro sector a alinear las estrategias de negocio de las empresas con los 17 ODS y a acometer actividades concretas que aporten en los distintos retos que la sociedad tiene en materia de pobreza o cambio climático, entre otros.
Además, formar parte de FIAB nos permite adherirnos a las iniciativas transversales que se están impulsando a nivel internacional, como la adhesión del sector al Pacto Verde Europeo (Green Deal) y a la estrategia Farm to Fork (De la Granja a la Mesa), centrado en la transformación sostenible de la industria de alimentación y Bebidas.
Además, nos permite estar presente en foros internacionales como la Cumbre sobre Sistemas Alimentarios Sostenibles que se ha celebrado en septiembre en las Naciones Unidas y que contó con la preparación de las empresas del sector a través de los Diálogos Nacionales auspiciados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
¿Qué sinergias esperáis generar a nivel de contribución a los ODS con las acciones conjuntas que estáis emprendiendo en vuestro sector?
El sector de snacks viene promoviendo la realización de alianzas con agentes de la cadena de valor con el propósito de explorar posibles iniciativas que multipliquen el impacto en materia de sostenibilidad. En esta línea podemos destacar las colaboraciones que los elaboradores de snacks vienen manteniendo con entidades como la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (AECOC), la Asociación de Empresas del Canal Impulso, el Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS)… nos permiten conseguir una mayor coordinación y acción conjunta para contribuir al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y promover el avance de toda la industria hacia la sostenibilidad de nuestro sector y de la industria alimentaria en general.
Con nuestras acciones, tratamos de aportar valor a la cadena, a clientes y consumidores. El sector se configura así como un eslabón importante para conseguir una cadena de suministro alimentario sostenible.
¿Cuál creéis que es la situación actual del impacto de vuestra actividad en España a nivel ambiental?
Las iniciativas que vienen desarrollando los elaboradores de productos de aperitivo han alcanzado importantes logros en materia de coordinación con los productores agrícolas locales para la adopción de prácticas eficientes y sostenibles, el uso eficiente del agua y de recursos energéticos, la reducción de emisiones y la gestión adecuada de residuos. Esto nos pone en el camino correcto para una adecuada transición ecológica del sector.
¿Cuáles son los otros grandes retos y desafíos/oportunidades de tu organización en materia de sostenibilidad?
Los logros alcanzados nos impulsan a redoblar nuestros esfuerzos para potenciar el impacto en los ejes prioritarios de actuación del sector en materia de sostenibilidad:
- A nivel de packaging, seguir siendo uno de los principales actores activos en la búsqueda de soluciones que permitan mejorar el reciclado de materiales y racionalizar al máximo el uso de plástico. El objetivo es lograr un 100% de envases reciclados y reciclables, por supuesto, sin afectar a las propiedades y vida útil del producto.
- A nivel de gestión de residuos, reforzar las iniciativas implantadas para lograr la plena circularidad de los residuos generados por nuestra actividad. En este ámbito, el principal reto es avanzar hacia la consecución del residuo cero.
- A nivel medioambiental, seguir trabajando para aproximar a nuestro sector, en el período de tiempo más corto posible, al objetivo de cero emisiones.
- Contribuir al desarrollo social (sobre todo, a través de la creación de empleo, los salarios dignos, la promoción y formación del talento, las políticas de inclusión laboral y equidad).
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: “La sostenibilidad en el sector agroalimentario español”.