¿Qué papel juega la alta dirección en las políticas de RSC y sostenibilidad de la compañía?
La discusión sobre la aplicación de los criterios ESG -Enviromental, Social y Governance- está actualmente en las mesas de los consejos de dirección de todas las empresas y la tecnología está marcando la agenda de la aplicación de los mismos y ayuda a superar los retos que plantean.
Hacer un buen uso de la tecnología ayuda a construir un mundo más sostenible, diverso, inclusivo, responsable y ético. Microsoft tiene como meta ayudar a las organizaciones a avanzar en sus objetivos ESG a través de la digitalización, la mejora de la sostenibilidad mediante la eficiencia energética de la nube y la apuesta por la economía circular.
Para cumplir mejor la misión de Microsoft, centramos nuestros esfuerzos mediambientales, sociales y de gobernanza (ESG) donde podemos tener un impacto más positivo.
¿Cómo materializan este compromiso?
Como reflejo de la importancia que le damos, hemos creado un comité que forma parte de nuestro Consejo de Dirección, que trabaja para mejorar y hacer un seguimiento de nuestras políticas, programas y objetivos en este área.
Hemos desarrollado una estrategia que busca conseguir un impacto positivo en las geografías en las que estamos presentes, a través de iniciativas centradas en la capacitación digital inclusiva y diversa; en el desarrollo de tecnologías para la acción humanitaria; y en la mejora de las accesibilidad de nuestras soluciones para personas con discapacidad.
Además, desarrollamos una estrategia de sostenibilidad medioambiental muy activa, que está en el corazón de nuestra estrategia y en la que están implicados todos nuestros empleados.
Creemos que las compañías tecnológicas, como Microsoft, tienen que trabajar para aplicar soluciones innovadoras a los retos medioambientales, lo que incluye el desarrollo de algoritmos verdes, la aplicación de Inteligencia Artificial para evaluar las emisiones asociadas a la actividad empresarial y extraer conclusiones valiosas, la apuesta por soluciones de cloud computing que minimice las emisiones de carbono, y muchas otras innovaciones para definir nuestro presente y futuro.
¿Cómo trasladan desde la alta dirección las metas y obligaciones adquiridas en estas materias a todos sus grupos de interés?
En Microsoft nos gusta ser transparentes. Aplicamos criterios ESG desde un compromiso activo con distintos grupos de interés: empleados, clientes, socios comerciales o accionistas, fomentando la responsabilidad y la transparencia y promoviendo la toma de decisiones adecuadas.
En el ámbito de la sostenibilidad medioambiental, por ejemplo, acabamos de presentar nuestro último informe anual, en el que compartimos nuestros avances durante el último año.
¿Cuáles son las claves para que la comunicación sea exitosa, transparente y creíble?
La clave es la honestidad y la humildad; se trata de compartir los aprendizajes y los avances conseguidos, desde el convencimiento de que todos podemos aprender de las mejores prácticas desarrolladas por otras empresas y organizaciones.
¿Qué retos han tenido que afrontar para hacer de la compañía una empresa más responsable y sostenible?
Culturalmente, hemos pasado de ser una compañía que creía que lo sabía todo, a ser una organización absolutamente comprometida con el objetivo de aprenderlo todo. Trabajamos por algo en lo que creemos y para hacer del mundo un lugar mejor. Tenemos una misión muy inspiradora de empoderar a cada persona y empresa del planeta a hacer más.
En Microsoft trabajamos para habilitar y favorecer que todas las personas puedan acceder a la tecnología y tengan las mismas oportunidades laborales. Por ello, estamos haciendo mucho hincapié en la formación de personas, incluyendo las que se encuentran en situación de vulnerabilidad y les ayudamos en su objetivo de reciclarse y acceder a los nuevos puestos de trabajo que trae consigo la digitalización.
Entre otras acciones, hemos lanzado junto a LinkedIn una iniciativa de formación online gratuita para impulsar la capacitación digital, a la que han accedido en España más de 1.600.000 personas.
En España trabajamos principalmente con fundaciones, como por ejemplo, Fundación ONCE, Fundación Esplai o Factoría F5, que conectan con muchísimas entidades en todo el territorio para llegar a colectivos vulnerables o poco representados en el mundo de la tecnología.
La próxima apertura de nuestra región de centro de datos en España también representa una oportunidad en este sentido, pues viene asociada a iniciativas de desarrollo comunitario que estamos poniendo en marcha en los municipios donde estarán ubicados estos datacenters. Entre ellas, se incluyen actividades de alfabetización digital, proyectos de economía circular y medioambientales.
Y es que otro de los grandes desafíos a los que nos enfrentamos es la sostenibilidad. La innovación sostenible y el cuidado del planeta han dejado de ser una moda para convertirse en una prioridad estratégica para todos, también por supuesto, para las empresas.
En Microsoft trabajamos la sostenibilidad empezando por nosotros mismos. Nos hemos marcado unos objetivos muy ambiciosos: trabajamos para ser negativos en emisiones de carbono para 2030 y queremos conseguir para 2050 la eliminación del carbono que hemos emitido desde nuestra fundación. Además, queremos ser una compañía ‘cero residuos’ en operaciones directas, productos y embalajes para el año 2030.
Trabajamos para ser el socio de confianza en el desarrollo de la estrategia de sostenibilidad de nuestros clientes y abogamos por políticas para alcanzar objetivos corporativos y sociales y ser un partner estratégico en alianzas que impulsen la digitalización sostenible.
En definitiva, queremos promover un futuro sostenible, donde todos tengan acceso a los beneficios y las oportunidades que crea la tecnología.
Mirando al futuro, ¿cuáles son los próximos desafíos?
Continuaremos con nuestra misión de capacitar a cada persona y a cada organización del planeta para lograr más. Como hemos comentado, un gran desafío al que nos enfrentamos es la de la falta de talento digital para poder aprovechar las oportunidades de la digitalización y que pueden favorecer áreas como la sanidad, la educación, la lucha contra el cambio climático, etc.
Asimismo, la sostenibilidad será clave, y es un área donde las empresas tecnológicas tienen la oportunidad y la responsabilidad de trabajar para lograr un mundo más sostenible.
De todas las buenas prácticas que llevan a cabo desde su compañía ¿cuál es el logro que le hace sentir más orgulloso?
Queremos que las personas con discapacidad puedan acceder en igualdad de condiciones a la digitalización y a las oportunidades que supone. Por ello, trabajamos desde hace más de 20 años con ONCE y con Fundación ONCE en torno a tres grandes prioridades: estimular el desarrollo y mejora de tecnología accesible; usar esta tecnología para crear más oportunidades laborales para personas con discapacidad -capacitación, educación y empleo-; y fomentar una cultura empresarial que haga posible construir lugares de trabajo más inclusivos.
Hemos implementado una filosofía de “accesibilidad por diseño”, no solo para nuestros productos, sino también para las herramientas y servicios que brindan soporte a los desarrolladores y proveedores de software que crean soluciones para nuestros clientes o empleados.
El objetivo final es garantizar un modelo de digitalización inclusiva que no deje a nadie atrás.
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