Carolina Hernández, directora de Comunicación y Personas de Bornay, ha hablado con Corresponsables sobre las bases de sus políticas ESG, la evolución de su compromiso a lo largo del tiempo, y los desafíos y oportunidades de futuro en este ámbito.
Fundada en 1970 en Castalla (Alicante), Bornay cuenta en la actualidad con presencia en más de 70 países. Diseña y fabrica sus máquinas en España al 100%, en un centro de producción creado conforme a los principios de la arquitectura bioclimática y que se abastece de energías renovables. Su departamento de I+D+i está dedicado a la mejora continua de los productos de la compañía, que también es distribuidora de gamas de productos relacionados.
Bornay, cuya misión es “llevar energía donde no la hay”, está comprometida con la sostenibilidad desde sus inicios. La empresa apuesta por un modelo de negocio que no solo busca la eficiencia energética y la reducción del impacto ambiental, sino también el bienestar de sus empleados, y el apoyo a las comunidades, a través de colaboraciones con ONGs.
“Nuestra responsabilidad social se vertebra en tres círculos concéntricos. El primero, corresponde a nuestra organización, a los colaboradores. La responsabilidad social la entendemos en tanto en cuanto afecta al bienestar de nuestros colaboradores, de las personas con las que compartimos el día a día. Ellos son los receptores de muchas de nuestras políticas de responsabilidad social. En un segundo círculo, nos centramos en nuestro entorno local, nuestra provincia y nuestra comunidad autónoma, en Castalla, Alicante, Comunidad Valenciana. Donde apoyamos el deporte, la salud, el bienestar, y con el arte, participando en aquellos aspectos que tienen que ver con la mejora del entorno. Y, por último, nos lanzamos al mundo, ya que nuestra misión es llevar energía donde no la hay. Colaboramos con diferentes ONGs y congregaciones religiosas, para ayudar a personas vulnerables, que no tienen acceso a la energía, en comunidades como puede ser Tanzania, el Congo, o Venezuela. Bornay está siempre ahí para aportar soluciones que permitan, como nosotros decimos, iluminar sonrisas”, explica Carolina Hernández.
Innovación y compromiso ambiental
Desde sus inicios, Bornay ha sido sinónimo de innovación en el sector de las energías renovables. La empresa desarrolla tecnologías que proveen soluciones energéticas limpias y promueven la sostenibilidad ambiental a nivel global. Carolina Hernández destaca el enfoque de la compañía en la creación de aerogeneradores y sistemas híbridos fotovoltaicos que buscan maximizar la eficiencia y minimizar el impacto ambiental.
“Fabricamos aerogeneradores de pequeña potencia para viviendas unifamiliares e industria, no la gran eólica que vemos por las carreteras, sino para pequeñas casas de campo. Aquellos lugares que requieren un apoyo de energía más allá de la energía solar y distribuimos todos los productos que necesita una instalación de renovables para poder funcionar: paneles solares, inversores, inversores, baterías, etcétera, etcétera. A nivel de responsabilidad social, es una empresa comprometida totalmente con el entorno y con el mundo”, dice la directora de Comunicación y Personas de Bornay
Medición del impacto y eficiencia
Las políticas ESG de Bornay forman la columna vertebral de su cultura organizacional. Estas políticas se centran en la promoción de la igualdad, el bienestar de los empleados y el desarrollo sostenible. Carolina explica cómo la empresa ha integrado estas prácticas en todas sus operaciones, asegurando que cada decisión se tome considerando su impacto en el medio ambiente, la sociedad y la gobernanza corporativa.
La eficacia de las políticas de sostenibilidad de la empresa se mide y evalúa, tanto en el impacto ambiental como en el progreso hacia objetivos sostenibles. La directiva de Bornay señala la importancia de este aspecto para asegurar que la empresa cumple con sus objetivos:
“Fundamentalmente nos basamos en las certificaciones. Trabajamos para que certificaciones como el sello EFR, de Empresa Familiarmente Responsable, por ejemplo, nos evalúe en cuanto a indicadores que tienen que ver con la conciliación dentro de la de la empresa. También a través de la revisión de nuestra memoria, por parte de Pacto Mundial, antes de su publicación, para que ese informe de progreso, que además es público y se puede consultar en su página web, cuente con un control de un organismo como Pacto Mundial. Esas son nuestras medidas e indicadores más importantes. También hacemos una medición a nivel interno de las cuestiones o actividades que más han valorado las personas durante el año; cuáles son las que más les han aportado, o las que más les han gustado. Y recogemos todas esas opiniones que son realmente útiles”, concluye Carolina Hernández.
Como Empresa Familiarmente Responsable (EFR), Bornay ha implementado medidas para fomentar un equilibrio entre la vida laboral y personal de sus empleados, como horarios flexibles y programas de bienestar, que contribuyen a crear un ambiente de trabajo positivo y saludable.
La acción social de Bornay, que se manifiesta en sus colaboraciones con ONGs, iniciativas solidarias y patrocinios, o los desafíos y oportunidades de futuro, son otros de los temas abordados en esta entrevista.
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