En el marco del evento “Proyectando un futuro sostenible”, organizado por la Fundación Hazloposible, en el que varios expertos nacionales e internacionales, como Emilio García, ex Director del gabinete de Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, hablaron sobre las últimas tecnologías al servicio de lo social, y la tecnología como motor de cambio para crear un mundo mejor y sostenible.
Emilio García aseguró que la capacitación digital y la conectividad son cuestiones que son necesarias satisfacer como sociedad.
¿Cuáles son los elementos clave en el ámbito digital para crear un mundo mejor y más sostenible?
Los elementos clave pasan por la conectividad y por las capacidades digitales. La conectividad, sin ir más lejos, dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) es la única meta tecnológica que está dentro de un ODS, concretamente en el de infraestructuras, que es la conectividad universal. Sin esos dos elementos, el resto de las cuestiones tecnológicas que se puedan desarrollar dentro de las aplicaciones no van a existir. Ni podremos emplear el teletrabajo, ni la inteligencia artificial y tampoco cualquier otro tipo de aplicación.
¿Existen brechas digitales en estos elementos? ¿Cuál es la extensión de estas brechas digitales en España?
Las brechas digitales siempre existen, aunque depende mucho al final del territorio en el que estés y de las necesidades que vayas a tener. En España tenemos una buena disponibilidad de redes, pero sí que existen personas que no tienen acceso a una conectividad ilimitada o no tienen acceso a las capacidades digitales. Dentro del análisis más estrecho, más duro e intenso, que se ha hecho de las brechas digitales ha sido recientemente el último Informe Foessa de desigualdad. Este informe hablaba de que un 35% de hogares, o bien no tenían conectividad, o bien no tenían recursos para emplear estas capacidades digitales. Aun así, estamos a tiempo de poder solucionar esas brechas.
¿Hay una correlación entre las desigualdades heredadas y las nuevas desigualdades que nos trae la tecnología?
Sí, el Informe Foessa también es bastante clarividente. Como podíamos esperar, los hogares que están en riesgo de brecha digital son los que se encuentran en exclusión severa. Así, los hogares cuya conectividad es débil o con escasos recursos para usar las capacidades digitales es de un 35%, la brecha digital en los hogares en exclusión severa llega hasta el 51%. Además, no es solamente el hecho de que las brechas analógicas se extiendan al mundo digital, sino que son dos elementos que actúan de refuerzo. Al estar viviendo en una sociedad que cada vez es más digital, de manera evidente, si estás en el lado equivocado de la brecha digital, vas a perder la oportunidad de poder desarrollarte y alcanzar nuevas metas.
¿Cómo podemos integrar nuestro contrato social en la vertiente digital? ¿Se está haciendo todo lo posible para ello?
Al final, lo digital es un tema transversal y una necesidad básica que los ciudadanos tienen que ver satisfecha. Es fundamental tener conectividad y capacitación digital. Tenemos que ver cómo integrarlo dentro de nuestro contrato social, igual que en el pasado hemos integrado la educación o la sanidad. Hay elementos de la educación que un ciudadano los tiene satisfechos por ser parte de la sociedad. Tienes el derecho a la educación primaria, a la educación secundaria y el derecho a la educación infantil también se consolida.
La capacitación digital y la conectividad y, por supuesto, una plataforma de acceso, son cuestiones que tenemos que satisfacer como sociedad. En unas ocasiones estarán financiadas por el Estado, y otras veces mediante obligaciones que se pongan a las empresas para poder satisfacer esas demandas. En España, se está haciendo todo lo posible. En la ley de Telecomunicaciones que se ha aprobado recientemente, ya se incluye el concepto de que las empresas de telecomunicaciones tienen que disponer de paquetes asequibles para los ciudadanos más vulnerables. Este tipo de cuestiones, poco a poco se van incorporando, y es lo que se está tratando.
Por último, ¿cuáles son los retos y desafíos de futuro de la tecnología al servicio de lo social?
En este momento hay que procurar solucionar lo más básico, que son la conectividad y las capacidades digitales. Al igual que en el pasado, dentro del contrato social solo estaba la educación primaria y poco después se incluyó la educación secundaria. Evidentemente, en la tecnología pasará lo mismo. En el futuro, la brecha digital probablemente sea que no se tenga un asistente personal basado en inteligencia artificial.
Los gobiernos y los estados siempre tienen que estar atentos para ver como satisfacer esas nuevas brechas y yo creo que, además, hay otro factor que todavía no está desarrollado, que es la institucionalización de la lucha contra la brecha digital. Al ser una brecha transversal, quizá tiene más sentido que las luchas contra las brechas transversales estén en departamentos transversales dedicados a la igualdad en lugar de estar en el área de los departamentos tecnológicos como sucede ahora mismo.