¿Cuál es tu función actual en Fairtrade International y en qué consiste tu trabajo?
Mi nombre es Maija Lummen y trabajo en el Centro de Excelencia de Derechos Humanos de Fairtrade Internacional.
Mi trabajo actual consiste en desarrollar nuevos servicios para que las organizaciones Fairtrade puedan ayudar a las empresas con el cumplimiento de los nuevos requisitos de la Debida Diligencia.
¿Por qué es importante la DDDH para una organización internacional como Fairtrade?
La Debida Diligencia es un tema superimportante para todas las organizaciones y empresas. En parte, por la legislación que se está aprobando: la EU está a punto de lanzar una directiva sobre la Sostenibilidad Social Corporativa, con nuevas regulaciones para el proceso de reporte. Y en parte también porque todo lo relativo a la sostenibilidad medioambiental está cambiando, y eso es lo verdaderamente relevante.
Antes, se podía cumplir con los requerimientos de una manera mucho más laxa, simplemente con esquemas de sostenibilidad voluntarios. Pero ahora es diferente y debido al cambio climático, todas las empresas y organizaciones necesitan adoptar este enfoque de Debida Diligencia, lo que supone un ejercicio de aprendizaje continuo.
Y esto es lo que es importante para nosotros en Fairtrade, porque queremos asegurarnos de que nuestras propias operaciones, nuestro propio trabajo, esté alineado con los nuevos requerimientos y que por supuesto, ayuda a las empresas con las que trabajamos.
¿Cuál de los proyectos que has dirigido últimamente te gustaría destacar en esta entrevista?
Como bien sabéis, están aprobándose nuevas leyes que las empresas tendrán que cumplir y desde Fairtrade estamos ofreciendo una serie de servicios para ayudarles. Uno de esos servicios es el recién lanzado Mapa de Riesgos Fairtrade.
Para lanzar esta herramienta, desde mi departamento hemos estado cooperando con colegas de todo el Sistema Fairtrade, desde las redes productoras hasta las diferentes organizaciones de Fairtrade nacionales, como Fairtrade Ibérica, y hemos desarrollado servicios que pueden apoyar, no solo a nuestros licenciatarios sino a todas las empresas que así lo necesiten, a identificar los riesgos en sus cadenas de suministro, con el fin de planificar un trabajo de prevención y mitigación, y también comunicación sobre dichos desafíos relativos a la Debida Diligencia.
¿Por qué es importante la DDDH para las empresas?
Los Derechos Humanos y la Debida Diligencia Medioambiental son importantes para las empresas no solo por las leyes que se están o se van a aprobar, sino también por las expectativas, cada vez más altas, de los consumidores. El creciente interés por parte de todo el mundo en materia de derechos humanos y medioambientales, así como el hecho de que siempre es bueno asegurarse de hacer lo mejor para evitar causar ningún riesgo a las personas o al planeta, ayuda sin duda a que las empresas cumplan con la Debida Diligencia.
Como decía antes, acabamos de lanzar el Mapa de Riesgos Fairtrade, una herramienta interactiva, muy fácil de usar y abierta a todo el mundo, con el que es sencillo dar el primer paso para evitar y prevenir los riesgos en las cadenas de suministro globales. Este primer paso consiste en identificar los riesgos en las cadenas de suministro de 5 materias primas con las que trabajamos a nivel mundial y que son: cacao, café, bananas, vino y miel.
Una vez identificados esos riesgos, se debe empezar a trabajar en prevenirlos y mitigarlos. Y la certificación Fairtrade puede ser una buena solución en esta etapa, puesto que, con todo nuestro sistema de elaboración de estándares y continuas auditorías, trabajamos por la sostenibilidad de los productores y de las tierras que cultivan. Por todo ello, decimos que colaborar con Fairtrade en materia de Debida Diligencia es una gran oportunidad para las empresas, ya que pueden contar con nosotros y tenernos como verdaderos aliados en su viaje hacia la sostenibilidad.
¿Qué les dirías a los consumidores finales que aún no tienen en cuenta la certificación Fairtrade a la hora de hacer sus compras?
A los consumidores les diría que tienen un enorme poder que ejercen cada vez que llenan su cesta de la compra y que vale la pena que lo usen bien. Que vale la pena que sean conscientes y consecuentes con sus decisiones de compra, y que elijan, siempre que puedan, productos con el sello Fairtrade.
Porque de verdad marcan la diferencia en la vida de las personas y en las tierras que los producen, porque de verdad luchan contra la explotación infantil y contra el cambio climático, porque de verdad defienden los derechos de los trabajadores y la igualdad de género, porque de verdad ponen el foco en un futuro justo para todos.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: Comunidad Fairtrade.