¿Cuáles son actualmente las principales líneas de actuación de la campaña Digitalización Sostenible y cuáles son sus prioridades a corto plazo?
La campaña Digitalización Sostenible tiene como objetivo principal luchar contra la brecha digital, haciendo posible que las empresas puedan donar equipos tecnológicos para que las ONG puedan hacérselos llegar a las personas en situación de mayor vulnerabilidad que sufren más dificultades para acceder a las nuevas tecnologías y, por tanto, ven limitadas sus opciones de inclusión y participación social. Al mismo tiempo, se contribuye a alargar la vida útil de los aparatos electrónicos, lo que redunda en beneficio del medio ambiente.
Desde la Fundación CEOE hemos impulsado esta iniciativa en el marco del proyecto ‘Empresas que ayudan’, con la participación de los principales Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (Ecotic, Ambilamp, Ecoasimelec, Ecofimática, Ecolec, Ecolum y ERP España) y la colaboración de la Fundación SEUR.
¿Cuáles son los principios que promueven a la hora de implicar al tejido empresarial de toda España en la recogida selectiva de dispositivos electrónicos?
Ciertamente, promovemos principios que, desde hace ya bastantes años y de manera creciente, están muy presentes en la empresa española: la solidaridad, la apuesta por no dejar a nadie atrás y el compromiso con la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, el entorno en el que en definitiva vivimos. Las empresas tienen como fin, no solo aportar valor económico, sino también social, por lo que creemos que esta iniciativa se adecúa perfectamente a la filosofía de nuestras empresas.
Esto se ha visibilizado más que nunca durante esta pandemia. Empresarios y autónomos, cada uno en su ámbito y en unas condiciones muy difíciles, se pusieron a disposición de las administraciones para ayudar en todo lo posible y paliar situaciones como la falta de material de protección en los primeros meses de la crisis sanitaria.
Si algo ha puesto de manifiesto la pandemia es la importancia de las nuevas tecnologías en la sociedad, para acceder a servicios, para la socialización, etc. Son cambios que se estaban produciendo hace años, pero que la pandemia ha acelerado exponencialmente. Por ello, es imprescindible luchar contra la brecha digital, pues somos conscientes de que todavía hay muchas personas con dificultades para poder acceder a las nuevas tecnologías. Pero, al mismo tiempo que luchamos contra la brecha digital, con esta iniciativa se busca dar una segunda vida a equipos informáticos, reduciendo la huella medioambiental de las empresas. Y no se nos ocurre una segunda mejor vida que la de favorecer la inclusión de los colectivos más vulnerables de la ciudadanía.
¿Cuál ha sido la respuesta obtenida hasta la fecha entre sus aliados?
Hasta ahora la respuesta está siendo muy positiva. Contamos desde grandes empresas con donaciones elevadas, por su gran volumen de trabajadores, hasta pymes y autónomos, colaborando con pequeñas cantidades. Al final toda ayuda es buena, y podremos contar con unos resultados muy positivos en esta primera edición de la campaña.
De hecho, el plazo se ha ampliado un mes más, para poder sumar todas aquellas empresas que nos han solicitado el poder entrar y que no se queden fuera. Asimismo, cabe destacar que las entidades sociales con las que contamos se encuentran distribuidas por todo el territorio español, por lo que la ayuda llegará a todos los rincones.
¿Qué importancia le dan a la comunicación de sus avances e hitos?
Hay una frase que ya todos hemos escuchado muchas veces, pero no por repetida es menos cierta: lo que no se comunica no existe. Por esta razón, tratar de hacer lo posible para que las empresas conozcan este proyecto es esencial para que cada vez sean más las compañías que se animen a donar equipos informáticos. La vocación solidaria de nuestras empresas es ya un hecho y muchas veces lo único que hace falta es canalizar ese potencial. En definitiva, ayudarlas a ayudar.
La campaña es un claro ejemplo de impulso del ODS 17 relativo al establecimiento de Alianzas entre diferentes actores que buscan un objetivo común. ¿Cómo ha sido esta colaboración entre empresas, asociaciones empresariales y organizaciones del tercer sector?
Por supuesto que es un claro compromiso con el ODS 17, pero con todos en general, porque como decía, se contribuye al fomento de la economía circular, colaborando entre las empresas, y trabajar con el tercer sector contra la exclusión de los más vulnerables. Y todo ello lo hacemos juntos.
Para superar esta crisis desencadenada por la pandemia y los retos que ya teníamos anteriormente, tenemos que trabajar todos juntos. Todos los esfuerzos suman y, en este caso, la capilaridad de las organizaciones empresariales en el tejido productivo es la vía por la que canalizamos la circulación de empresas y organizaciones sociales, conectando oferta de ayuda y necesidades de las entidades sociales, que son las que están a pie de calle trabajando con las personas que viven con más dificultades en su día a día.
En suma, somos tres pilares interconectados e imprescindibles para trabajar en la construcción de una sociedad mejor. Son muchos los problemas que tenemos por delante, pero entre todos podremos superarlos.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables Digitalización Sostenible – Empresas que ayudan a reducir la brecha digital