“Más que discapacidad, los artistas que trabajan con nosotros tienen supercapacidades”

La tecnología puede abrir nuevos caminos para la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad en el mundo del arte. Así se puso de manifiesto durante el evento ‘Tecnología para la inclusión’, que celebró la Fundación SIFU en el CaixaForum Madrid el pasado 19 de diciembre
 
Allí pudimos conocer tres ejemplos de que, si ponemos el desarrollo tecnológico al servicio de la inclusión, es posible lograr que lo único importante sean las ganas de expresarse artísticamente. Hablamos de tres instrumentos musicales como el EyeHarp, que permite interpretar música con la mirada; el  Travel Sax,  un saxofón que se puede tocar con una sola mano, sin hacer mucha presión sobre las teclas o teniendo una baja capacidad pulmonar y el El Oxi One, un secuenciador musical con herramientas intuitivas para la composición y con botones accesibles.
 
En ‘Tecnología para la inclusión’ también se insistió en la importancia de que este tipo de instrumentos llegue a las escuelas de música, y en promover también que dichas escuelas y que todos los espacios culturales en general sean diseñados para que resulten accesibles e inclusivos de partida. De todas estas cuestiones hablamos en la siguiente entrevista con Oriol Saña, músico y Director Artístico de la Fundación SIFU.