¿Qué importancia tiene para vuestra organización formar parte de la IEEB y qué beneficios le aporta a las empresas adheridas?
Trabajamos de la mano de expertos en conservación que proceden del tercer sector y pequeñas pymes, una de las principales palancas para lograr aumentar el nivel de biodiversidad en la recuperación de los entornos mineros en los que operamos, a la vez que generamos empleo verde.
En este sentido, la colaboración con la Iniciativa Española Empresa y Biodiversidad nos permite dar una mayor visibilidad a los esfuerzos realizados para aumentar el capital natural de nuestra actividad. También creemos que constituye un foro ideal para unirnos con otras empresas en la realización de proyectos de ámbito estatal o en el impulso de iniciativas como fue la elaboración de la Guía Práctica de Restauración Ecológica.
¿De qué forma está vuestra organización apostando por la conservación de la biodiversidad? ¿Nos puedes explicar brevemente vuestra evolución hasta la actualidad?
Somos una compañía que depende de recursos naturales procedentes de canteras. Por tanto, un eje fundamental de nuestra política de sostenibilidad es su gestión responsable, el fomento de la biodiversidad y la recuperación y conservación de hábitats en el entorno donde operamos.
Desde el año 2000, y ayudados por el asesoramiento de grandes ONGs como WWF y UICN, se ha introducido en el negocio la necesidad de evaluar el nivel de biodiversidad en el entorno de nuestras canteras, clasificarlas por su nivel de sensibilidad y comprometernos públicamente a la elaboración de Planes de Gestión de Biodiversidad que permitan dejar un territorio de mayor valor natural que el que existía antes del inicio de la actividad. Es decir, que a nivel compañía, podamos demostrar una contribución global positiva en términos de biodiversidad.
Concretamente en España, todas las canteras activas que proveen de materias primas a las fábricas de cemento tienen en marcha actuaciones para apoyar la recuperación de hábitats o especies de interés, que van más allá de los proyectos de restauración oficiales.
Además, sobre unas 20 canteras que por razones de mercado se encontraban inactivas hace años sin expectativas de reactivación, la empresa ha tomado la decisión de iniciar el trámite de abandono de labores y su restauración definitiva. En vez de retrasar indefinidamente la decisión, se ha iniciado un proyecto emblemático, solicitando la modificación de los proyectos de restauración antiguos por unos nuevos en los que la incorporación de actuaciones para incrementar la biodiversidad y, en su caso, la puesta en valor del patrimonio geológico, son la clave fundamental.
¿Puedes especificarnos algunas buenas prácticas y/o iniciativas concretas que estáis llevando a cabo en esta materia y qué objetivos persiguen?
Los colaboradores conservacionistas están identificando muchísimas oportunidades para poner en marcha en las canteras, no sólo en los procesos de rehabilitación, sino también en las canteras activas. Por ejemplo, hemos impulsado un innovador sistema en el que las aves granívoras y las abejas juegan un papel fundamental.
Conscientes de que tanto esta tipología de aves como las abejas actúan como bioindicadores de la calidad del medio y contribuyen a la dispersión de las semillas, hemos optado por la instalación de colmenas de abejas silvestres en nuestra cantera de Sagunto; de colmenas propias de abejas melíferas en Yepes; y, en otros casos, por acondicionar y ceder espacios para el uso de apicultores locales que encuentran en las canteras un hábitat abierto, especialmente adecuado, para la instalación de su actividad. Complementariamente, realizamos siembras de especies herbáceas autóctonas, que son seleccionadas de forma previa, para adaptarlas a las preferencias de los grupos de insectos polinizadores más abundantes.
Además, en algunos territorios optamos por mantener los roquedos de algunos frentes de canteras con la finalidad de crear un biotopo propicio para la ocupación y nidificación de aves rupícolas. En otras ocasiones, apostamos por la creación de varias charcas y zonas inundables someras que pueden ser empleadas por algunas especies de anfibios e incluso servir de zonas de descanso eventuales para algunas aves de paso y para el asentamiento de comunidades vegetales higrófilas.
También es habitual la construcción de majanos, con el objetivo de mejorar las poblaciones de conejos, ya que estas infraestructuras sirven como zonas de refugio y reproducción para estos animales y otras especies como micromamíferos, reptiles o anfibios, cuya presencia se ha constatado en la zona. De esta forma, se consigue fortalecer las poblaciones de conejos que constituyen la base de la cadena alimentaria de muchas otras especies depredadoras como las águilas.
También, en aquellos frentes de explotación donde se exponen estructuras geológicas de interés (ej. Interior de conos volcánicos) hemos acondicionado la cantera como lugar visitable para apoyar su divulgación mediante geoturismo. De hecho, con todas estas actuaciones están alineados con la Resolución recientemente aprobada por la UICN: WCC-2020-Res-088-ES sobre “Conservación de la diversidad natural y el patrimonio natural en entornos mineros”
En la actualidad, estamos contribuyendo positivamente, a través de plantaciones experimentales, a la recuperación de una especie amenazada perteneciente a la lista roja de la UICN, y de dos hábitats en la Red Natura 2000, reforzando y conservando la calidad de su entorno. Además, contribuimos a la preservación de 10 especies o grupos de especies sensibles como son los anfibios, abejas silvestres, aviones zapadores, murciélagos, grandes rapaces diurnas y nocturnas, mariposas, etc.
Además, somos conscientes de la importancia de la labor educativa y, por ello, hemos puesto en marcha tres centros de educación ambiental, en los que tenemos la posibilidad de dar a conocer nuestra labor y sensibilizar a la población sobre el papel de la naturaleza, gracias a las visitas organizadas en las que recibimos a miles de personas al año entre estudiantes y miembros de asociaciones vecinales.
¿Cuál es la situación actual de la conservación de la biodiversidad en las estrategias de negocio de los diferentes sectores empresariales de la economía de nuestro país y sus principales barreras y obstáculos?
El problema fundamental es que muchos negocios no identifican claramente la relación entre su actividad y la biodiversidad.
En nuestro caso, hay una relación directa de responsabilidad a través de la rehabilitación de canteras y se ha incorporado a la estrategia del negocio de forma natural. Pero hay muchos sectores industriales que, aunque no tienen esa responsabilidad directa, deberían analizar la dependencia de los recursos naturales que tienen para el desarrollo de su negocio. Con ello, podrían entrar en empatía con su responsabilidad indirecta o directa no suficientemente regulada. Me refiero, por ejemplo, a la industria de la alimentación, que a través de la agricultura/ganadería, podrían actuar como una gran palanca de cambio positivo y revertir en nuestro territorio el declive que sufre la biodiversidad.
¿Cuáles son los otros grandes retos y desafíos de tu organización en materia de gestión socialmente responsable?
En estos momentos estamos volcados en la aplicación de nuestra Estrategia de Transición Ecológica, una hoja de ruta enfocada en tres pilares fundamentales: minimizar el uso de recursos naturales y fomentar la biodiversidad; reducción de emisiones de CO2 y lucha contra el cambio climático; e innovación para el desarrollo de productos y soluciones eficientes.
En relación con estos dos últimos pilares, apostamos por desarrollar productos y soluciones destinadas a una construcción más sostenible, poniendo el foco en dos aspectos clave: minimizar las emisiones de CO2 asociadas a la fabricación de los productos y el desarrollo de soluciones constructivas que combinen la eficiencia con la durabilidad y la estética. También productos que aporten soluciones basadas en la naturaleza frente al cambio climático.
Con la vista puesta en la neutralidad de carbono para el horizonte 2050, la compañía puso en marcha El Reto del Carbono, un laboratorio de ideas conformado por varios grupos de trabajo, dedicado a la investigación y la definición de medidas concretas en materia de descarbonización. Este proyecto permitirá sumar y compartir conocimientos que se materialicen en iniciativas concretas aplicadas a nuestros procesos y productos y soluciones.
En esta línea, a través del Grupo LafargeHolcim nos hemos unido recientemente a la iniciativa Science Based Targets (SBTi) “Business Ambition for 1.5 ° C”, convirtiéndonos así en la primera empresa global de materiales de construcción en firmar el compromiso público con objetivos intermedios para 2030, validado por SBTi. Este compromiso se basa en el liderazgo de la compañía en la construcción sostenible a través del desarrollo de productos y soluciones bajas en carbono.
Esta entrevista forma parte del Dosier sobre la Iniciativa Española Empresa y Biodiversidad (IEEB).