Oímos cada vez más hablar de RSC y Sostenibilidad (RSC/S) hasta el punto de que se ha convertido en mainstream. ¿Por qué crees que está tan “de moda”?
Yo no diría que está de moda, sino que la conversación se ha extendido a otros ámbitos además del de la empresa, ampliando el alcance y la repercusión. Así, el sector público ha seguido al privado acompañando con regulación, visibilidad e incentivos, Y la ciudadanía no solo ha comprendido la importancia de pasar a la acción, sino también de exigir veracidad y transparencia, y está adaptando sus comportamientos y decisiones de compra, aumentando así las expectativas respecto a las empresas.
En vuestra actividad diaria os relacionáis con pymes (proveedores, clientes, etc.). ¿Consideras que la RSC/S también está de moda en su caso?
Las pymes tienen más dificultades para integrar la sostenibilidad en sus organizaciones, modelos de negocio y de reporting.
En general se encuentran con barreras relacionadas con la falta de recursos humanos y financieros dedicados, herramientas de evaluación y estructuras transversales que puedan integrar políticas coherentes. A pesar de estos obstáculos, sí vemos un esfuerzo cada vez mayor de las pymes por alinearse.
Hay que analizar cuáles son sus retos concretos para poder facilitar su transformación hacia una mayor sostenibilidad y abordar el reto de los recursos buscando sinergias. En Impact Hub hemos desarrollado un programa de diagnóstico y acompañamiento para pymes, Actúa Sostenible, que precisamente es una herramienta para ayudarles a evaluar, medir y crear una estrategia de sostenibilidad integral.
Esta tendencia responsable y sostenible tiene su reflejo en las demandas de los stakeholders hacia la organización. ¿En cuáles de tus grupos de interés has notado un cambio más notable? ¿Destacarías algún caso concreto?
Nosotros trabajamos dentro de un ecosistema donde la exigencia de avance sostenible es alta por parte de todos los actores: nuestros miembros en los espacios, la comunidad, demanda conocimiento, coherencia en nuestras políticas, transparencia; nuestros partners y clientes buscan a su vez integrar en sus cadenas de valor empresas responsables y requieren compromisos concretos.
Impact Hub Madrid es empresa certificada B Corp desde el año 2018, lo cual supone un compromiso de avance en áreas concretas y la integración de sus principios en nuestra relación con todos los grupos de interés; y por último, nuestros órganos de gobierno ponen como prioridad los criterios sostenibles, además de los puramente financieros, tanto en el desarrollo de nuestra misión como en la rendición de cuentas.
Y en cuanto al departamento/área de RSC/S en tu entidad, ¿este aumento de presencia de la RSC/S se ha traducido en un aumento de recursos o de responsabilidades de tu función?
Tengo la suerte de que en Impact Hub no hay un departamento de RSC/Sostenibilidad, sino que ésta forma parte de nuestra misión y es un objetivo estratégico transversal a todas las áreas. Todas las personas del equipo reciben formación sobre cómo contribuir y participan en el desarrollo e implantación de iniciativas que nos hagan avanzar.
El “tsunami regulatorio” que se viene es una de las razones por las que la RSC/S está en boca de todos ¿qué adaptaciones a la regulación te van a dar más trabajo en el próximo año?
Como comentaba, somos B Corp desde hace tres años. Esto significa que, para cumplir con esta certificación, debemos anualmente medir y reportar nuestro desempeño social, ambiental y de gobernanza, lo que ha derivado en una serie de medidas que nos ayudan a impulsar la mejora continua del impacto de nuestra actividad.
Ser una empresa certificada por B Corp implica el cumplimiento legislativo, pero va más allá y en muchos casos nos sitúa muy por delante de éste. Por ejemplo, este año ya hemos logrado ser neutros en carbono en 2021, cuando el objetivo legislativo es a 2050 (Pacto Verde Europeo y la Estrategia Española de Descarbonización a Largo Plazo) o a 2030 en el caso de B Corp.
También disponemos de una política ambiental a pesar de que por nuestro tamaño y tipo de empresa no existe ninguna legislación que nos obligue a tenerla. Y continuamos trabajando en otras medidas no tanto porque nos obligue la regulación sino porque forma parte de nuestro ADN impulsar la sostenibilidad en todas las áreas: por ejemplo, a medio plazo queremos contar con una cadena de suministro sostenible y de aprovisionamiento local.