¿Qué motivó al Museo Nacional Thyssen-Bornemisza a desarrollar una Política de Medio Ambiente y Sostenibilidad tan ambiciosa y adelantada a la normativa europea?
Nuestro reciente plan estratégico 2024-2028, establece como uno de nuestros fines el renovar el compromiso del museo con la sostenibilidad y la diversidad, continuando con ese objetivo que ya veníamos imponiéndonos en el plan anterior. Entendemos que, hoy más que nunca, el museo juega un papel social no sólo practicando una cultura comprometida con el medio ambiente y la sostenibilidad, sino también desarrollando una labor pedagógica y de sensibilización, sobre estas cuestiones, entre nuestros públicos.
La política se anticipa a la Directiva sobre informes de sostenibilidad corporativa (CSRD). ¿Qué desafíos han enfrentado al implementar estas medidas antes de su obligatoriedad legal?
Estamos preparados para ello. La Política de medioambiente y sostenibilidad recientemente aprobada, es realmente un documento que compendia toda la normativa e iniciativas que, en este sentido, ya veníamos practicando desde hace años, como evidencian nuestras memorias de sostenibilidad publicadas desde hace siete años. Este documento articula una política medioambiental más ambiciosa, trasversal, con compromisos y procesos bien definidos, indicadores de medición y detallando los ámbitos y materias implicadas en el cuidado medioambiental.
¿Qué acciones concretas destaca en la nueva política en cuanto a la reducción de la huella de carbono y el gasto hídrico del museo?
Las políticas de consumo responsable vienen siendo una práctica habitual del museo, el control del consumo, las mediciones, la implantación de mejoras innovadoras en iluminación y aguas, reciclajes, reparaciones y reutilización de materiales usados en nuestras exposiciones y actividades culturales, la pedagogía y requisitos hacia nuestros públicos internos y externos, proveedores y visitantes, que al año alcanzan el millón de personas,… todo ello ubicado en nuestra sección web de medio ambiente, sostenibilidad y Agenda 2030.
¿Cómo contribuye el programa de sensibilización ‘ECO THYSSEN’ a generar conciencia sobre sostenibilidad tanto entre el personal del museo como entre los visitantes?
El programa THYSSEN ECO pretende concienciar y fomentar el compromiso con la sostenibilidad de nuestros empleados a través de diversas acciones. Éstas van desde la promoción de la alimentación sostenible o la reducción de los consumos, al reciclaje de aparatos eléctricos o ropa. Para este tipo de acciones en ocasiones buscamos alianzas con empresas y entidades ampliando el impacto. La sostenibilidad en el museo busca ser un proceso participado por parte de los empleados por lo que promovemos su implicación. Recientemente también se ha creado un comité de sostenibilidad que impulsará el avance de nuestra Política de Medio Ambiente de forma transversal.
En cuanto a la medición de la huella de carbono, ¿cuáles han sido los principales avances y resultados obtenidos hasta el momento?
Iniciamos la medición de la Huella de Carbono y registro en el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en el año 2022. En la actualidad, estamos en proceso de realizar la medición correspondiente al ejercicio 2024. A la luz de los resultados, nuestro objetivo ha de ser la compensación de las emisiones, puesto que la mayor parte se corresponden a los movimientos de obra derivados de las exposiciones que organiza el museo y los préstamos de nuestra colección, estrechamente vinculadas con nuestra misión. De hecho la huella de carbono del museo en 2023 fue un 32% mayor a la del año 2022 debido al cálculo en 2023 del movimiento de las obras de la colección que viajaron en préstamo a China para la exposición The Greats of Six Centuries: Masterpieces from the Museo Nacional Thyssen-Bornemisza en el Museo de Art Pudong en Shanghái. Además, nos gustaría impulsar la medición diferenciada de la huella de carbono de la Tienda del museo y de los eventos corporativos.
¿Qué papel juegan los museos como actores globales en la lucha contra el cambio climático y cómo se alinea el Museo Thyssen con este desafío?
Formamos parte de un grupo de trabajo internacional de museos, en los que el compromiso con esta política medioambiental y de sostenibilidad es un factor muy Determinante. Más de 200 millones de personas han visitado museos el año pasado, Imagínese el alcance de educación y sensibilización de esa plataforma.
¿Qué impacto espera que tenga esta política a largo plazo en la sostenibilidad del museo y en la preservación del patrimonio cultural?
Creo que es un factor muy relevante no únicamente en la eficiencia de consumos del museo, sino muy especialmente en la importancia del impacto del museo en la sociedad. Estas iniciativas en favor de la mejora de calidad de vida de las personas confieren al museo un mayor valor social que, sin duda, es una garantía para la sostenibilidad de la existencia del museo en sí mismo.
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