¿Qué importancia tiene para tu persona formar parte de Women in Banking?
Formar parte de WIB supone apoyar el hecho de dar visibilidad al talento femenino e inspirar a través de referentes a las nuevas generaciones de mujeres para que se atrevan a dar un paso adelante, a romper sus propios sesgos y a desarrollar una carrera profesional que sea la que ellas quieran. Tenemos también una responsabilidad e un impacto social muy importante porque somos referentes también para chicas, incluso niñas, que son las futuras generaciones de profesionales. Es fundamental empoderarlas en sus decisiones y no encasillarlas en los roles tradicionalmente femeninos.
¿De qué forma la organización en la que te desenvuelves profesionalmente está apostando por la gestión socialmente responsable? ¿Nos puedes explicar brevemente vuestra evolución hasta la actualidad?
En el Banco, consideramos que la igualdad y la diversidad nos hacen más competitivos y nos ayudan a generar una organización más cercana a la sociedad y a nuestros clientes. Somos una empresa que aprecia la diversidad en todas sus formas: es fundamental que cada persona de la plantilla se sienta valorada por ser quien es y como es. Y por eso la diversidad es uno de los pilares de nuestra cultura corporativa. La apuesta por la igualdad en el Banco no es algo nuevo, sino que llevamos años trabajando en ella.
Uno de los mayores hitos que hemos cumplido en el Banco este año es la firma del Plan de Igualdad 2022 – 2025 que persigue la equiparación total entre mujeres y hombres. Un plan que el Ministerio de Igualdad ha valorado muy positivamente a la hora de renovar nuestro Distintivo de Igualdad en la Empresa (DIE).
Se trata del tercer Plan de Igualdad de nuestra compañía, que se firmó en febrero de 2022 con el acuerdo del 100% de la RLT, siendo también el primer banco del sector financiero en España en adaptar su Plan de Igualdad a la nueva normativa. Antes de la firma de este plan, ya se habían hecho pasos destacados en materia de igualdad. En 2021, contábamos con el 54% de mujeres en su plantilla y una reducción continua de la brecha salarial. En dicho plan, nos comprometemos a alcanzar el 40% de representación femenina en mandos intermedios y un 30% de mujeres directivas en 2025.
En 2017, Banco Sabadell consiguió el DIE, que hemos ido prorrogando desde entonces. El Ministerio ha valorado muy positivamente los procedimientos de gestión de personal, que eliminan cualquier discriminación de género -y que permite la igualdad de oportunidades profesionales para mujeres y hombres -, así como medidas para impulsar y facilitar la flexibilidad, la conciliación, la información y los recursos disponibles en la red interna del banco. La formación obligatoria para personal con equipos a su cargo y por las actuaciones de responsabilidad social en materia de igualdad han sido también acciones valoradas de forma muy satisfactoria.
¿Puedes especificarnos algunas buenas prácticas y/o iniciativas concretas que estáis llevando a cabo en esta materia y qué objetivos persiguen?
A nivel interno, uno de los retos principales es seguir trabajando en la reducción de la desigualdad en todas sus formas y el incremento de la diversidad en el colectivo management. Como acciones concretas: hemos creado la figura de la Responsable de Igualdad y trabajamos en asegurar el cumplimiento del principio de igualdad; identificar talento femenino pre-directivo; y publicar un Protocolo de Acoso muy completo, entre otras muchas acciones de comunicación, promoción y fomento de la igualdad y la corresponsabilidad.
A nivel externo, marcan nuestro avance los compromisos con el Ministerio de Igualdad (Distintivo de Igualdad en la Empresa; “Más mujeres, mejores empresas”); y alcanzar los Objetivos de Compromiso Sostenible definidos en nuestra estrategia.
¿Cuál es la situación actual de la diversidad y el buen gobierno en vuestro sector y sus principales barreras y obstáculos?
En el sector financiero se ha avanzado mucho en materia de igualdad, diversidad e inclusión, pero es cierto también que queda mucho camino por recorrer, tanto en las plantillas y especialmente a nivel directivo. Las compañías hemos visto que la igualdad es un factor competitivo y es clave que sea una de las prioridades estratégicas de las empresas.
Son importantísimas medidas como las que he descrito en las preguntas anteriores pero también lo es el seguimiento de las mismas y los correspondientes planes de acción. La proporción de mujeres ha ido incrementando en el sector, ahora el mayor reto es aumentar la presencia femenina en niveles de responsabilidad, comités ejecutivos y consejos de administración.
¿Cuáles son los otros grandes retos y desafíos de tu empresa en esta materia?
A pesar de los avances del último año, el desafío más grande que tenemos es contar con más mujeres en las capas altas de toma de decisión y en el Comité de Dirección. Tenemos recorrido de mejora en cuanto a la proporción de mujeres en el mismo y estamos trabajando en ello con el objetivo de eliminar las posibles desigualdades que se puedan producir aquí.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: Sostenibilidad e innovación en la transición ecológica de la banca, en colaboración con Women in Banking.