Estas mismas exigencias han hecho que sea cada vez más necesario para las empresas evolucionar de esfuerzos meramente filantrópicos hacia una Responsabilidad Social es-tratégica realmente ligada al negocio, con el objetivo de avanzar en metas de desarrollo sustentable e inclusivo y a través de esquemas multisectoriales de cooperación con otros actores como el gobierno y las organizaciones de la sociedad civil.
El fenómeno descrito arriba es la razón de ser de la Fundación del Empresariado en México A.C. (Fundemex), que surgió en 2004 como una iniciativa del Consejo Coordinador Empresarial para convertirse en un movimiento de empresarios que creen y trabajan por el objetivo de promover el desarrollo económico y social de nuestro país.
En un país donde más de la mitad de la población vive en condiciones de pobreza, pero incluso donde cerca de las tres cuartas partes viven en condiciones de subsistencia –al día, sin posibilidades de crecer, dependiendo de subsidios—, somos una organización con la firme convicción de que el mundo empresarial tiene las capacidades necesarias para promover un cambio paradigmático en que sociedad y gobierno se sumen y trabajen de la mano para crear condiciones en que cada persona pueda realmente vivir la vida que valora; un México donde se hable más de desarrollo y menos de pobreza; un México cuya economía formal pueda realmente sostenerse a sí misma y satisfacer las necesidades de su población.
Nuestra estrategia, la Alianza para el Desarrollo Económico Inclusivo (ADEI), se basa en la promoción de esquemas de desarrollo centrado en las personas, en su trabajo y en la empresarialidad, con un enfoque territorial, sectorial y de largo plazo; todo ello para enfrentar los graves problemas de desigualdad y desempleo que sufre México.
Trabajamos con dos líneas estratégicas que nos permiten ahondar en los procesos más importantes del desarrollo de la economía formal: las cadenas de valor inclusivas y las oportunidades laborales para jóvenes. Al día de hoy, hemos logrado focalizar nuestros es-fuerzos en pocos proyectos pero con alto potencial para fomentar cambios sistémicos; en sectores que pueden generar un alto valor agregado pero con la visión de que este valor real-mente beneficie por partes iguales a las bases. Nos hemos hecho socios de citricultores, artesanas, apicultores, promotores turísticos y otras profesiones en diferentes regiones del país y hemos sido testigo de su desarrollo personal y empresarial.
Hoy nuestra Alianza suma a más de 6,000 empresas –pequeñas, medianas y grandes— que trabajan en conjunto por esta convicción y queremos invitarte para que tú también seas parte. Súmate a nuestra alianza y permítenos ayudarte a que tu responsabilidad social sea parte de este movimiento.