Buenos días a los miembros del presídium y a todos los que amablemente nos acompañan en la ceremonia inaugural del Seminario Internacional de Mejores Prácticas de Responsabilidad Social Empresarial, evento organizado por el Centro Mexicano para la Filantropía, el Cemefi, y nuestro aliado regional en el Estado de Querétaro, la Fundación Roberto Ruiz Obregón.
En septiembre pasado, varias entidades de nuestro país afrontaron desastres naturales que afectaron a distintas comunidades y a sus pobladores. Terremotos y huracanes dejaron numerosos damnificados a su paso, destacando el sismo que cimbró a la Ciudad de México y los estados de Morelos y Puebla.
Más allá del dolor y la pérdida, que lamentamos profundamente en todos los casos, la emergencia mostró también la solidaridad y generosidad de los mexicanos, tanto en lo individual como a través de las organizaciones de la sociedad civil y las empresas, especialmente las que son socialmente responsables.
La participación de los voluntarios en las labores de rescate, la apertura de innumerables centros de acopio y de cuentas bancarias para recibir donativos en efectivo, permitió hacer frente a la tragedia de la mejor manera posible, en colaboración con los diferentes niveles de gobierno.
El sector privado respondió rápidamente y con efectividad ante la contingencia. Quiero aprovechar este espacio para reconocer la labor de las compañías, de sus colaboradores y de los organismos empresariales. Este sector mostró nuevamente que su compromiso con México está mucho más allá de sólo generar empleos o cumplir con la Ley, mostró que es una parte fundamental de la sociedad en la que está inmerso.
Ante la emergencia, el Cemefi abrió un portal en línea para promover y difundir las acciones de las organizaciones de la sociedad civil y las empresas socialmente responsables en torno a los sismos de los días 7 y 19 de septiembre. En pocos días logramos registrar más de 250 iniciativas de apoyo, con especial énfasis en la reconstrucción de las comunidades y del tejido social en torno a ellas.
No me cabe duda que los hechos a los que me he referido, y la forma en que respondimos a ellos como mexicanos, son un parteaguas que nos permitirá reinventarnos como sociedad, recordando lo mejor que tenemos como país: la solidaridad y el compromiso con el bienestar de todos.
El año próximo tendremos elecciones federales y locales en distintas entidades federativas. Esta será la oportunidad de establecer un nuevo pacto social en el que la sociedad civil y el gobierno establezcan nuevas formas de convivencia, bajo la idea de que el país nos pertenece a todos.
Todas estas acciones, nos llevan a valorar cada día más la importancia de la decisión de construir La Casa de la Filantropita y la Responsabilidad Social Empresarial, espacio de las empresas socialmente responsables y de promoción de la filantropía en la sociedad, que le permitirá fortalecer sus acciones para tener el país que queremos todos los mexicanos. Los invito a todos a poner su huella en ella, para reunir los recursos necesarios para su construcción, como ya lo hemos hecho algunos. ¡No puedes faltar tú!
En su décimo segunda edición, el Seminario Internacional de Mejores Prácticas de RSE será, como es tradicional, el marco en el que se entregue el Reconocimiento a las Mejores Prácticas de Responsabilidad Social Empresarial de México y América Latina.
En lo que se refiere a nuestro país, este año recibimos 69 prácticas que fueron postuladas por 49 empresas. De éstas, 22 recibirán el Reconocimiento a las Mejores Prácticas de RSE, y otras 15 recibirán un reconocimiento especial como finalistas en sus respectivas categorías.
En cuanto a Latinoamérica, 17 empresas presentaron a concurso 25 prácticas, de las cuales 13 fueron seleccionadas para recibir el Reconocimiento. Sumando México y los otros países de América, tuvimos 94 iniciativas, presentadas por 66 empresas, reconociéndose un total de 35 como Mejores Prácticas de RSE.
Aprovecho para felicitar, por anticipado, a las empresas ganadoras y a sus colaboradores que estuvieron a cargo de su implementación y que las presentarán aquí, en Querétaro, como parte fundamental del programa de trabajo del Seminario que hoy nos convoca.
En este Seminario se muestra que la participación de la iniciativa privada, como parte de la sociedad civil, debe ir más allá del ámbito económico. Su responsabilidad social, entendida como su aporte al bienestar de la comunidad entera, debe ser la guía de su papel como un actor social que busca mejores condiciones de vida para todos.
Les invito, pues, a conocer algunas muestras del compromiso social de las empresas a través de las Mejores Prácticas que aquí se expondrán, con la seguridad de que nos servirán para inspirarnos y lograr el México que deseamos.
Muchas gracias.