Ivonne Piedras es Maestra en Políticas Públicas y Género por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) y cuenta con una licenciatura en Relaciones Internacionales por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Desde hace 13 años trabaja en organizaciones no gubernamentales impulsando campañas, acciones de comunicación y de incidencia en políticas públicas para promover los derechos humanos, la justicia social, la igualdad de género y el respeto a los derechos de la niñez y las juventudes.
Ivonne Piedras, Directora de Comunicación y Campañas de Save the Children, conversó con Corresponsables acerca del impacto que ha dejado el Huracán Otis en Acapulco y como la Organización responde ante ello.
¿Cuál está siendo la respuesta de su organización ante lo sucedido en Acapulco hasta el momento?
En respuesta, el equipo humanitario de Save the Children visitó los dos municipios declarados como zona de desastre natural, Acapulco y Coyuca de Benítez en donde pudo atestiguar el nivel de daños en casas, escuelas, así como las necesidades de familias que, a más de una semana del impacto del huracán, se encontraban sin haber recibido agua y comida.
En Coyuca de Benítez y colonias populares en la zona alta de Acapulco, nos encontramos con familias que no habían recibido ayuda humanitaria por la complejidad para llegar a las zonas afectadas, nuestro propio equipo tuvo que retirar árboles que se encontraban obstruyendo caminos, conocimos a gente que, hasta nuestra llegada, solo se alimentaban con galletas.
En coordinación con las autoridades locales y protección civil, logramos entregar más de 2,800 paquetes de alimentos, 6,547 litros de agua potable, kits de bienestar e instalamos un espacio amigable para dar contención emocional a niñas y niños.
Para responder a la gravedad de la emergencia, Save the Children mantendrá presencia en las zonas afectadas apoyando con acciones enfocadas a la protección de la niñez, entrega de kits de higiene y saneamiento, recuperación de materiales para vivienda y escuelas y provisión de kits de alimentos.
Además de las entregas urgentes, se perfila una estrategia para recuperar los servicios educativos, para apoyar con soluciones de agua y saneamiento, y para acompañar alternativas de ocupación y medios de vida para que las familias puedan encontrar alternativas dignas de tener sus propios ingresos.
¿Cuáles considera que son actualmente los principales obstáculos y barreras para lograr ayudar aún más a Acapulco y cómo estos se pueden superar?
Muchas familias lo han perdido todo, desde alimentos, ropa, muebles, hasta útiles escolares y juguetes; en Coyuca, por ejemplo, las casas fueron arrasadas por la corriente del río que creció a raíz de las fuertes lluvias provocadas por Otis; las calles aún están llenas de escombros, las casas que permanecen de pie se encuentran repletas de lodo, árboles caídos y animales muertos, condiciones que representan un foco de infección para la población, particularmente para niñas y niños.
Las escuelas que pudo visitar la organización se encuentran completamente destruidas, los techos de lámina desaparecieron, el inmobiliario se destruyó, las ventanas se rompieron y restos de objetos y árboles se encuentran esparcidos alrededor, haciendo imposible que los planteles puedan reabrir para reanudar las clases.
Nos preocupa el estado de las escuelas, las escuelas son espacios de aprendizaje, lugares seguros para niñas y niños y son un aliado en el proceso de resiliencia después de la catástrofe, sin embargo, vemos muy difícil que muchas logren abrir pronto, sobre todo las que se encuentran en la zona de la montaña en Acapulco. No olvidemos a los docentes también, ellos se encuentran preocupados por recuperarse de la afectación del huracán, muchos también lo perdieron todo y necesitamos también con ellos impulsar el apoyo emocional.
Hoy más que nunca todos debemos ser corresponsables con Acapulco; ciudadanos, organizaciones privadas, públicas, no lucrativas… Muchos dicen que no quieren ayudar porque creen que las ayudas nunca llegarán a destino. ¿Qué mensaje daría a los ciudadanos y a las organizaciones en estos momentos para lograr aún más ayuda, apoyo?
La situación se puede tornar aún más compleja conforme pasan los días; muchas niñas y niños han cambiado sus actividades de educación y juego para dedicarse ahora a cuidar hermanos menores o limpiar los restos de casas afectadas. Los precios de los alimentos han aumentado en más del 50% y aún no se restablecen todos los servicios básicos para toda la población.
La situación es verdaderamente crítica; se requieren esfuerzos en conjunto para lograr que las comunidades se recuperen lo más
pronto posible.
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Todas las personas pueden aportar sus donativos a través de la plataforma emergenciahumanitaria.mx; no hay cantidad pequeña ante la necesidad tan apremiante.
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