¿Cómo ha avanzado México en materia de sustentabilidad en los últimos años?
La Ciudad de México fue las primeras entidades federativas en publicar su ley local en materia de Cambio Climático con un enfoque específico en el desarrollo sustentable, acompañada de un plan de acción climática. En estas se prevé, por ejemplo, la creación de un mercado de carbono que permita comercializar las reducciones en las emisiones de Gases con Efecto Invernadero no sólo en la Ciudad de México, si no en mercados internacionales. Asimismo, la Ciudad de México es la primera en el País en desarrollar y publicar su Plan Verde.
¿En qué consiste esta iniciativa?
El Plan Verde es un plan de acción para los siguientes 15 años que busca garantizar el desarrollo sustentable de los habitantes de la Ciudad de México. Su intención además es involucrar a los ciudadanos en la promoción del uso racional de los recursos naturales. El Plan Verde fue diseñado ante la necesidad de que la Ciudad de México continúe siendo un espacio adecuado para sus habitantes, ofrezca calidad de vida y habitabilidad. Con base en siete ejes, esta iniciativa cuenta con 77 metas claras, que forman la base de su estructura y cuyo fin es revertir los principales procesos que han ocasionado el deterioro de la calidad de vida.
Como se ha visto en Rio+20, el desarrollo sostenible es percibido como uno de los grandes retos del siglo XXI. ¿Cómo va a gestionarse desde México?
Con la mayor parte de la actividad económica mundial y más del 50% de la población concentrado a día de hoy en núcleos urbanos, las ciudades han pasado a jugar un papel fundamental en la implantación de una economía verde. Uno de los principales objetivos de la Economía Verde es conseguir un sistema económico sostenible, o dicho de otra forma, lograr la equidad intergeneracional.
Para favorecer los sectores más respetuosos con el medioambiente, cabría considerar al menos tres alternativas proactivas por parte del sector público global. La primera, privilegiar a los sectores más “verdes” mediante subvenciones o incentivos fiscales, de modo que las inversiones privadas sean dirigidas a éstos; la segunda, establecer normas que prohíban el ejercicio de determinadas prácticas o actividades dañinas con el medio ambiente, y en tercer lugar, aprobar un marco regulador para determinados instrumentos de mercado que ayuden a la conservación del medio natural, entre los que destacan los impuestos y los derechos de emisión.
¿Qué medidas tiene previsto el Ministerio de Medio Ambiente para minimizar las emisiones de CO2 y qué papel tienen las empresas en este ámbito? ¿Y para regular la materia de gestión del agua y del resto de materiales?
El Programa de Acción Climática de la Ciudad de México (PACCM) 2008-2012 contiene un conjunto de acciones con las que el Gobierno del Distrito Federal hace frente al calentamiento global, mediante la reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y a la adaptación a los efectos del cambio climático. El diseño y aplicación de este instrumento ha permitido a la Ciudad de México ser líder en el mundo al tener un Programa para mitigar sus emisiones de GEI, adaptarse a los efectos del cambio climático y trabajar en la comunicación y educación hacia la población. El PACCM se aprobó un año antes del Programa Federal, demostrando la importancia del tema en la agenda del gobierno de la Ciudad de México.
¿La responsabilidad medioambiental es un valor añadido de las empresas o el único modo de supervivencia? ¿Piensa que tienen futuro las compañías que no se comprometan con el cambio climático?
La Ciudad de México impulsa un nuevo modelo económico que involucra al gobierno, al sector privado y a los ciudadanos en el conocimiento de la interdependencia de las economías humanas y los ecosistemas naturales. La apuesta es sentar las bases de un sistema económico que sea compatible con el desarrollo financiero natural de una mega urbe, pero que al mismo tiempo mantenga un equilibrio con el medio ambiente y que sea socialmente justo. Queremos que se comparta la visión de las oportunidades de inversiones en producción, comercio, distribución y consumo de productos y servicios amigables con el ambiente.
¿Qué papel tiene en este reto global el resto de actores y colectivos como ONG, asociaciones, mundo académico, ciudadanos…? ¿Y los medios de comunicación?
El hecho de que los gobiernos locales, en especial los de las ciudades más grandes del mundo, estén actuando de manera proactiva para mitigar GEI y adaptarse al cambio climático, aunado a la conveniencia económica de algunas tecnologías disponibles en la actualidad (a diferencia de hace una década cuando las tecnologías solares o los motores eficientes eran demasiado caros) representa una gran oportunidad para avanzar y acelerar el ritmo de la reducción en la emisión de GEI a nivel global.
Por ello el Pacto de la Ciudad de México hoy en día se está consolidando como un nuevo mecanismo de negociaciones internacionales que dará impulso al mercado verde. Pero sin duda resulta indispensable establecer alianzas entre los gobiernos, la industria y las comunidades para la economía verde, para la creación e implementación de políticas verdes y reformas normativas. Es un asunto prioritario para las ciudades del mundo reducir el riesgo para las próximas generaciones, por lo que se requiere del apoyo y financiamiento internacional para avanzar de manera más rápida en el objetivo de frenar desafíos de gran magnitud como el calentamiento del planeta y así reducir el perfil de riesgo de los siguientes 20 o 25 años. Una alianza que también resulta indispensable es la inclusión de la sociedad civil, ya que más allá de las decididas alianzas con instituciones multilaterales y gobiernos nacionales, requerimos del papel activo de la sociedad. Ninguna política pública va a tener éxito sin la intervención, acción y participación de los ciudadanos.
