¿Por qué una Fundación Empresarial?
La idea de tener una Fundación Pernod Ricard México parte de la intención de darle autonomía de gestión, autonomía presupuestaria, autonomía de planeación, estratégica y de decisiones a la Responsabilidad Social Corporativa de esta compañía. En la estructura de una empresa, si la RSE se mezcla con las otras actividades de la compañía que van encaminadas a obtener un beneficio comercial pudiera haber el peligro de que gane el afán comercial sobre la actividad de RSE que casi nunca tiene ese beneficio, por eso decidimos separar a la fundación y hacerla autónoma.
La fundación tiene su propio patrimonio, su propio staff… Queremos evitar que algún día tuviéramos 100 pesos y tener que decidir en apoyar la nueva campaña de alguna de nuestras marcas o apoyar algún proyecto de no consumo de alcohol en menores. De hecho como fundación nos hemos propuesto no usar los proyectos de RSE para mencionar a nuestras marcas. No mezclamos la gimnasia con la magnesia.
¿Qué barreras encuentran en sus iniciativas al pertenecer a la industria de bebidas alcohólicas?
La principal barrera es la desconfianza pues cuando hablo de consumo moderado la gente quiere ver dónde está la trampa pues no ven la promoción de nuestras marcas y desgraciadamente nuestro sector no tiene mucha credibilidad en cuestiones de RSC. Por eso no hablamos como marca. Eso hace que se cuestionen nuestros proyectos. Pero en Pernod Ricard creemos que si protegemos a nuestros clientes protegemos a nuestras marcas en el largo plazo.
¿Entonces apuestan por el consumo responsable?
Más bien promovemos la responsabilidad ante el consumo. Hay situaciones en las que no se debe consumir y debe haber cero tolerancia como menores de edad, las mujeres embarazadas, aquel que va a conducir un vehículo o en aquellas que no se tuvo una relación sana con el alcohol. ¿Por qué promovemos esta responsabilidad ante el consumo si es una contradicción porque se supone que quiero vender mi producto? Es que no vendemos alcohol, queremos que nuestros productos sean una experiencia de consumo.
¿Y cómo promueven esa responsabilidad ante el consumo?
El uso nocivo del alcohol es un círculo vicioso y se tiene que destruir desde diferentes puntos de vista y uno de ellos son las campañas pero hay otro que puede ser igual de efectivo. Así investigando descubrimos que tenemos en México un problema de falta de entrenamiento en nuestros niños de habilidades para la vida. Es por ello que empezamos a trabajar con niños en quinto año de primaria a través de universidades para apoyarlos financieramente haciendo un diagnóstico en el que nos dimos cuenta que no estamos preparando lo suficiente a nuestros niños en habilidades para la vida. Iniciamos una campaña junto a la elaboración de un manual de habilidades para la vida con la Universidad Anáhuac sur que estará validado a mediados de 2015.
Entonces no trabajan solos…
Tenemos alianzas con gobierno por ejemplo a través de la donación de trafitambos a los que ponemos mensajes con sentido. Colaboramos con las universidades financiando proyectos de investigación. Colaboramos con ONGs y fundaciones así como otras empresas del ramo. En RSE la suma de 2+2 no suma cuatro, suma 22. El uso nocivo del alcohol tiene muchas causas y no se va a resolver atacando una sola de las causas y eso implica que todos tenemos que participar, y tenemos claro el papel que ha de tener en esta causa la industria.