Como rector de la Universidad del Valle de Atemajac (UNIVAC), me he propuesto impulsar una serie de estrategias y proyectos de innovación y competitividad. El fortalecimiento de la Universidad como un sistema integrado, para lograr la cohesión como equipo, la eficiencia como organización y un ambiente cada vez más agradable para el trabajo es una de estas líneas estratégicas.
La regionalización de la Universidad nos deberá traer un trabajo en equipo y unidad, y nos ha de permitir ser más productivos y eficientes, e innovadores en los procesos académicos y administrativos. La ampliación de la oferta educativa y el mejoramiento de la calidad de los servicios educativos mediante programas actualizados pertinentes con las necesidades sociales y económicas es otro de estos ejes estratégicos.
Habremos de continuar buscando el reconocimiento de organismos acreditadores nacionales y de la comunidad en general, pero sobre todo, de nuestros estudiantes, eje central de nuestra razón de ser.
La rentabilidad de la operación de cada uno de los planteles y programas educativos que ofrecemos, con la finalidad de garantizar un crecimiento económico sustentable que nos permita mejorar nuestros servicios y condiciones de atención a nuestros usuarios es otra línea estratégica que seguimos.
Finalmente, implementaremos un Plan de Desarrollo Institucional que guiará los próximos cinco años, orientando cada estrategia, proyecto y proceso, hacia la excelencia universitaria y posicionándonos como la Universidad Católica de México distinguida por la competitividad y la formación integral de nuestros estudiantes.
Los retos 2016
El año 2016 tenemos que asumirlo con sus temores y esperanza, para lograr que sea distinto y mejor. Tenemos grandes fortalezas, una experiencia que nos garantiza lograr lo que deseamos, una identidad católica más sólida, con más de 60, 000 egresados que son el testimonio de la calidad de nuestro proyecto educativo, una comunidad de profesores y personal administrativo comprometidos con el aprendizaje de los alumnos, la aceptación y el apoyo de empresarios, la relación con las áreas gubernamentales y el reconocimiento de obispos y arzobispos de los diócesis.
Nuestra Universidad no puede quedar indiferente ante el contexto social; creemos que el fin de la educación es contribuir a formar personas y una sociedad con los valores humanos, cristianos, morales y políticos como base de un camino hacia la concordancia y la paz, junto con los aportes de la ciencia y la tecnología; es el amor el elemento fundamental para construir el Reino de Dios predicado por Jesucristo.
Para el año 2016 he propuesto trabajar de manera prioritaria los siguientes aspectos de la vida universitaria:
- La implementación del Plan Integral de Desarrollo 2016-2020.
- Iniciar el proceso de acreditación institucional ante FIMPES (2016-2018).
- La consolidación del Sistema UNIVA.
- Una atención esmerada a la formación de nuestro cuerpo académico.
- Una constante revisión de los servicios universitarios.
- Claridad y eficiencia de la comunicación institucional.
- Participación comprometida con las presidencias de PIMPES y de ODUCAL.