Así, podemos decir que ha habido un avance de la Responsabilidad Social en México, en primer lugar en la conciencia del empresario y, en segundo lugar, en sus prácticas empresariales.
Ha habido una evolución del pensamiento en términos de que no estamos hablando de programas aislados, sino de la gestión estratégica e integral de la oranización. Esto es lo que hacen los diversos organismos afiliados a AliaRSE. Por ejemplo, en el trabajo de los distintivos de Empresas Socialmente Responsables buscamos ir acompañando y reconociendo a las empresas en esta tarea de ser cada vez más responsables con su entorno, sus colaboradores, el medio ambiente, la sociedad, la comunidad política, las administraciones públicas, la comunidad cívica, etc.
Tenemos ya un 40% de empresas medianas y pequeñas aproximadamente, incluso ya hay algunas microempresas que están trabajando para obtener el distintivo. Esto implica ya la conciencia de que el distintivo en sí mismo tiene un valor comercial, pero que sobre todo es un proceso de reflexión organizacional.
ALIARSE
En AliaRSE, hace año y medio éramos 12 organismos y ahora ya somos 25. Hemos estado sumando más y más, y ello es muy enriquecedor para la institución misma ya que permea dentro de los organismos para que las delegaciones regionales se vayan incorporando cada vez más activamente y difundan entre los agremiados esta manera de manejar la empresa.
Para lograr que la RSE se convierta en un proceso de mejora continua, las empresas deben completar el ciclo de la conciencia. Lo primero es comprender las implicaciones de la RSE. Lo segundo, la congruencia, es decir, tratar de ser cada vez más coherentes entre lo que se dice y lo que se hace. Y el tercer punto sería la comunicación, hay que hablar del tema, difundirlo, convencer, etc. Y regresar otra vez a una nueva comprensión de la situación.
Por ejemplo, en este momento la realidad de México es diferente a la de hace dos años. La macroeconomía, la estabilidad, las posibilidades de venta y los problemas en Europa y China son una oportunidad para México. Entonces, hay que ser capaz de reaccionar con una visión constructiva de país, de empresa y de oportunidades para las personas. Comprender el momento y sus indicaciones es otra dimensión.
A mi modo de ver, durante los próximos años, la RSE en México va a tener una incidencia más fuerte en el tema público, en pro del bien común.