El sector del fitness y de la promoción de la actividad física tiene mucho de social. Ayudamos a miles de personas a mejorar su salud y calidad de vida, a socializar y hacer comunidad. Sin embargo, en Claror siempre hemos entendido que la contribución social no era de por sí una garantía de llevar a cabo una gestión socialmente responsable. Es condición necesaria pero no suficiente.
Desde antaño, nuestra misión afirma que “mejoramos la calidad de vida de las personas, con un planteamiento inclusivo, éticamente responsable y de compromiso con nuestro entorno”. Nuestro eslogan “Más que fitness” se declina como “una potente oferta deportiva, responsable y comprometida”. Y hemos traducido estas palabras en políticas y acciones tangibles que guían nuestras decisiones y hacen de Claror una entidad que supervisa su gobernanza, gestiona el diálogo con sus grupos de interés y mide sus impactos ambientales y sociales.
En 2019 fuimos el primer operador deportivo del Estado español en obtener el sello dorado 500+ de la European Foundation for Quality Management (EFQM), un modelo de gestión que incide en todos los ámbitos de la responsabilidad social y ayuda a las organizaciones a establecer procesos de mejora continua aspirando a la excelencia.
Echando la vista atrás, hemos sido conscientes que la solvencia financiera de aquel momento, la consolidación de los procesos, la relación con los grupos de interés, el buen clima laboral, el buen posicionamiento en el mercado y reputacional fue sin duda una de nuestras bazas para poder superar la crisis pandémica (2020-2021) y el posterior golpe por el fuerte impacto en el coste de los suministros (2022). Ser y gestionar de manera socialmente responsable nos hizo mucho más fuertes para superar la adversidad.
Y es más, estas dos crisis consecutivas nunca fueron excusa para dejar de mirar el futuro.
Como reza el modelo EFQM, el éxito de las organizaciones está en gestionar el presente sin dejar de planificar el futuro (y yo añado: a pesar del supercontexto VUCA que estábamos viviendo). Y es por ello que entre 2022 y 2023 más de 70 personas de la entidad colaboraron para integrar y desarrollar una estrategia basada en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“Hacer para Transformar”
Hoy, superados los malos momentos y una vez recuperado el equilibrio económico, miramos el futuro con muchos aprendizajes y renovada ilusión. Apostamos por un liderazgo transformacional y por acompañar nuestro equipo a darle un sentido transformador a su trabajo. Porque lo tiene.
Para formalizar nuestro compromiso hemos lanzado un Plan Estratégico 2024-2026, muy inspirador y disruptor en el sector del fitness y la gestión deportiva. Un Plan que con el lema “Hacer para Transformar” se centra en los 7 ODS priorizados, que a su vez se despliegan en 17 proyectos liderados por equipos multidisciplinares.
El ODS 3, Salud y Bienestar, es el principal. En este sentido, aspiramos a ser auténticos creadores de experiencias con el reto de poder ofrecer un servicio personalizado, aun teniendo miles de abonados de todas las edades y condiciones. También estamos desarrollando alianzas con el sector público de salud. La prescripción social y, en concreto, la receta deportiva es un buen mecanismo para acompañar a las personas hacia un estilo de vida más activo y saludable.
Claror suma más de 600 personas en su equipo y el ODS 8 también forma parte de nuestro día a día. Con 4 proyectos estratégicos, nos vamos a centrar los próximos tres años en mejorar nuestras políticas de talento, el liderazgo por parte de los mandos intermedios y en mejorar la experiencia en todo el ciclo de vida de un trabajador/a.
El tercer ODS principal es el 13, acción por el clima, y se despliega en tres proyectos sobre eficiencia energética e hídrica, procedimientos de economía circular focalizados en la triple R (reducir, reutilizar y reciclar) y acciones para promover la compra y la movilidad sostenible.
También nos sumamos al ODS 4, Educación de calidad, y el ODS 10, Reducción de las desigualdades. Los dos contribuyen a diferenciarnos y reforzar nuestro SER como entidad. Nos focalizamos en la infancia y el poder del deporte para transmitir valores. Y vamos a seguir apostando por una gestión inclusiva, que facilite el deporte a colectivos vulnerables y promueva el trato digno y la igualdad de oportunidades de todas las personas, del equipo y de los usuarios.
Y por último, no entendemos nuestra actividad sin tener en cuenta el ODS 16 y el ODS 17. Porque garantizar la solidez de la organización y la justicia social es una prioridad. También lo es trabajar las alianzas con terceros y contagiar la convicción que las organizaciones debemos pasar de competir para ser las mejores del mundo, a colaborar con el objetivo de ser las mejores para el mundo.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: La gestión responsable en los territorios de Catalunya, de la mano de Respon.Cat.