¿Es posible dibujar un perfil de la mujer líder? A lo largo de mis años de trabajo en la ONG internacional CODESPA, he ido descubriendo unos rasgos comunes en mujeres de Perú, Ecuador, Marruecos, Congo, Filipinas y otros muchos países. Pensando en ellas, me atrevo a identificar los rasgos de un liderazgo femenino que promueve a su alrededor el desarrollo y el bienestar.
Esa mujer se caracteriza por su actitud flexible, solidaria y humana, que resulta tan atractiva. Sabe escuchar, aprende de todo y de todos. No busca reconocimiento o estatus social. Consigue ir sorteando obstáculos y prescinde de las quejas y de la palabra ociosa. Saca lo mejor de cada circunstancia para conseguir su propósito. Es más amiga de los hechos que de las palabras. Actúa desde los valores, y no es dada a la precipitación o la improvisación. Normalmente está en posición de alerta ante lo que pueda venir y, por tanto, abierta al cambio.
Quien quiera ver este retrato hecho vida debería viajar al asentamiento humano El Ángel, en Huaral, Perú. A las mujeres de allí, el deseo de ver progresar a sus hijos les hace luchar como auténticas guerreras. Su facilidad para las relaciones humanas sienta las bases de un “capital social” que es básico para la economía local.
Recuerdo a Julia como si la estuviera viendo. La conocí hace tres años, durante un viaje en el contexto del proyecto “Huaral Emprende”. Nos recibe hablando en quechua, con una sonrisa de oreja a oreja, su jersey rojo, su falda escocesa y una gorra para afrontar el calor insoportable en los caminos de polvo del asentamiento por el que se desplaza con su carrito. Hace ya 30 años, llegó caminando desde Ayacucho al Asentamiento humano de El Ángel con sus cuatro hijas; la mayor no llegaba a los diez años. Recorrió más de 600 kilómetros con lo puesto. Vino sola con ellas, porque su marido la maltrataba.
Ahora, con más de 60 años, sigue trabajando con orgullo.
Gracias al capital semilla de CODESPA, ha mejorado los ingresos por la venta de una bebida que ella ha inventado, con propiedades de hidratación y digestión. Como premio a su plan de negocio, ha recibido un crédito, con el que ha comprado un nuevo carro. Es más ligero y fácil de limpiar, de materiales más nobles. La historia continúa, porque una de sus hijas también ha sido premiada como emprendedora.
Las mujeres líderes que he conocido tienden a compartir. Comparten lo malo porque necesitan apoyo, y comparten lo bueno… porque son así. Esto las hace más fuertes y más audaces en los negocios.
Todos los profesionales de CODESPA, desde la selva amazónica hasta el río Agusán, compartimos esta certeza: en situaciones de gran adversidad, las mujeres son más capaces de superarse a sí mismas… y más fiables a la hora de devolver un crédito. Aun sin pretenderlo, o quizás también por ello, son líderes en su aldea, pueblo o ciudad. Son inspiración para cualquiera de nosotros. Para cada una de ellas, todo nuestro reconocimiento.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Mujer y Liderazgo, elaborado en colaboración con IESE Business School.