Elena Galante es consultora, en España y América Latina, y asesora a empresas y otras organizaciones en su camino hacia la Sostenibilidad. Además es investigadora adscrita a la Cátedra de Responsabilidad Social de la Universidad de Alicante y colaboradora externa de diferentes medios de comunicación especializados en Responsabilidad Corporativa.
En este artículo amfori ha invitado a Elena a compartir su perspectiva a nivel nacional y local sobre cómo cuidan las empresas a sus proveedores ante el COVID-19, por su dilatada experiencia en la materia. Entre otras colaboraciones anteriores entre amfori y Elega Galante, amfori ha sido incluida entre las organizaciones entrevistadas para un artículo colaborativo que analiza la respuesta de las empresas frente a sus cadenas de valor globales como resultado de COVID-19, con especial énfasis en la industria de la moda y la confección, elaborado por un equipo de investigadores de la Universidad de Granada (España), EAFIT Medellín (Colombia), Baruch College en Nueva York (EE.UU.), entre los que se encuentran la propia Elena.
La crisis del COVID-19 nos está dejando decenas de ejemplos y enseñanzas que nutrirán los manuales de supervivencia empresarial de aquí en adelante.
Los medios de comunicación están reflejando los esfuerzos del sector privado por amortiguar los impactos sociales y económicos de la crisis. El tipo de acciones está evolucionando conforme pasan los días y surgen nuevas necesidades.
Desde el inicio de la crisis hasta ahora, el apoyo directo de las empresas a sus grupos de interés ha ido en aumento. Prácticamente el 50% de las acciones se concentran en beneficio de empleados, proveedores y clientes y el 50% restante, en beneficio de la sociedad en general.
De entre las cientos de iniciativas, ¿qué acciones de Responsabilidad Corporativa está desarrollando el sector privado para amortiguar los impactos de la crisis en sus proveedores?
Las principales medidas de apoyo a proveedores identificadas en el análisis de prácticas de Responsabilidad Corporativa desde inicio del COVID-19 son las siguientes:
- Apoyo Reducción de los tiempos de pago. Acortar el plazo de pago a proveedores fue una de las primeras medidas que tomaron las empresas para amortiguar el impacto de la crisis en su cadena de valor. Vodafone y Bankinter, por ejemplo, han acortado el plazo de pago a sus proveedores hasta un máximo de 15 días, en vez del tope habitual de 60 días.
- Préstamos especiales. Buscando aportar otras soluciones económicas, empresas, como el Banco Santander, ofrecen préstamos con condiciones favorables a sus proveedores, específicamente diseñados para pago de plantillas. Con esto, no solamente ayudan a sus empresas proveedoras a tener liquidez y mantenerse activas durante la crisis, si no que además contribuyen a mantener los puestos de trabajo que estas generan.
- Apoyo al tejido nacional. Priorizando la contratación de proveedores locales y nacionales, algunas cadenas de supermercado, como Caprabo, que abre sus supermercados a pequeños productores y cooperativas agrarias, o Lidl, que refuerza su compromiso con el sector lácteo español, están contribuyendo económicamente a algunos sectores productivos durante la crisis.
- Información y formación en prevención. La necesidad de mantener estrictas medidas de higiene, las cuales se vuelven altamente exigentes durante esta crisis, ha derivado en un trabajo conjunto entre empresas y proveedores, para asegurar estos estándares sanitarios en su cadena de valor. Si bien empresas de todos los sectores están reforzando estas medidas, las empresas del sector alimentario y de transporte llevan el liderazgo. Vemos los esfuerzos de empresas como Zity o la EMT de Madrid, trabajando con sus proveedores para higienizar constantemente los vehículos, o empresas de alimentación reforzando la información que poseen sus proveedores para garantizar la máxima higiene en el envasado y transporte de alimentos.
- Pago por servicios futuros. Las empresas relacionadas con la restauración y el turismo destacan en esta iniciativa. El Tenedor o Tripadvisor ofrecen la posibilidad de pagar por servicios en restaurants y bares, y de comprar bonos de regalo, para consumirlos cuando la normalidad permita su reapertura. Esto ofrecerá un pequeño respiro a un sector especialmente castigado.
Estas iniciativas de Responsabilidad Corporativa, demuestran la importancia que los proveedores tienen como grupos de interés para las empresas. El apoyo a la cadena de valor repercute en una mejora de la productividad, la minimización de riesgos y el fortalecimiento de la propia empresa.
Los proveedores son aliados estratégicos, y su fortalecimiento, es el fortalecimiento de la propia empresa.