El propósito social sin duda es rentable. Según Global Human Capital Trends, el informe anual de Deloitte sobre el carácter de las empresas en todo el mundo de 2018, el 84% de los millenials consideran que las empresas deben valorarse por su rendimiento social y medioambiental, no sólo financiero. E igual revelan muchos otros informes.
En este sentido, si hablamos de emprendimiento social hemos de hablar Ashoka de Corresponsables, editorial que nació también de un emprendimiento social hace más de 15 años. Ashoka es una fundación sin ánimo de lucro, fundada en Estados Unidos en 1981, que se ha erigido por méritos propios en una organización de referencia en este campo y en la actualidad cuenta con una comunidad de más de 3.600 Emprendedores Sociales en más de 90 países, entre ellos España y México, donde Corresponsables compartió durante muchos años su sede social.
Ahora presentamos el Dosier Digital: Emprendedores Sociales -en alianza con Ashoka España- en el que diversos líderes sociales de ámbitos totalmente distintos exponen su visión del cambio y del impacto social de las organizaciones y las personas que las conforman.
La falta de recursos públicos para conseguir los objetivos marcados, el corto recorrido histórico de la ayuda privada en el ámbito del emprendimiento social y la falta de indicadores correctos en estos ecosistemas son solo algunos de los grandes obstáculos a los que se enfrentan los líderes sociales entrevistados en el presente Dossier y que ven posible superar gracias al establecimiento de alianzas y a la complicidad de nuestra sociedad.
