La conservación del medioambiente y la lucha contra el cambio climático se han convertido, en los últimos años, en una clara prioridad para las empresas, independientemente de su tamaño y actividad.
Según el primer estudio sobre la situación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, el 86 % de las grandes empresas ya cuenta con una estrategia formal de sostenibilidad. Una tendencia a la que también se ha sumado el sector funerario, que deja una huella inequívoca en el medioambiente debido al elevado número de cremaciones e inhumaciones que se realizan al año en España, entre otros factores.
Además, existe un entorno normativo, en el que se encuentran el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático, la Ley de Cambio Climático y Transición Energética o la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular, entre otros muchísimos ejemplos, que resulta complicado eludir. Teniendo en cuenta esto, y la creciente exigencia de los clientes, es ya prácticamente imposible garantizar la continuidad temporal de un negocio sin priorizar la gestión sobre criterios sostenibles.
En nuestro caso, durante los últimos años, hemos realizado un intenso trabajo para integrar los ODS en nuestra actividad y, precisamente, este año hemos aprobado el I Plan de Sostenibilidad de Grupo Albia y la Política de Sostenibilidad, proyectos transversales a toda la compañía que se marcan ambiciosos propósitos, entre los que se encuentra alcanzar la neutralidad climática en 2050.
Sin lugar a duda, el sector funerario, profundamente arraigado a tradiciones en todo el mundo, está viviendo los años de mayor transformación de toda su historia, desde su profesionalización, allá por la primera mitad del siglo XX. Entonces, lo habitual era despedir a los seres queridos en casa, con los familiares y amigos más cercanos. Ahora, debido a la evolución de la sociedad, en términos tecnológicos y medioambientales, principalmente, están surgiendo nuevos productos y servicios funerarios personalizados, digitales y responsables.
Centrándonos en la importancia que está cobrando el factor sostenible en las despedidas, y dado que hoy celebramos el Día Mundial del Cambio Climático, es necesario recordar que ya existen multitud de maneras de minimizar el impacto medioambiental derivado de la actividad funeraria. Por mencionar algunas: las que se concentran en el uso de ataúdes y urnas biodegradables, la electrificación de la flota funeraria o el impulso de servicios con proveedores locales y productos kilómetro cero.
Para nosotros, resulta evidente que debemos priorizar la adaptación a estas tendencias y demandas de los clientes, proporcionando servicios significativos y respetuosos a las familias, en un mercado cada día más exigente y con unos consumidores cada día más informados y sensibilizados.
Para ello, una medida clave está siendo la propuesta de renovación progresiva de nuestra flota, para basarla en vehículos híbridos y eléctricos. También nos estamos preocupando por implementar productos ecológicos. Asimismo, ponemos a disposición de las familias arcas, féretros, urnas y sudarios completamente ecológicos.
Otra medida clave que estamos implementando en el plano medioambiental es, la instalación de placas fotovoltaicas y hubs de recarga de vehículo eléctrico en nuestros centros, con el objetivo de fomentar su eficiencia energética y reducir considerablemente las emisiones de CO2.
También respaldamos e impulsamos acciones específicas encaminadas a favorecer la transición energética del sector y la economía circular a través de la gestión responsable de residuos.
Con todo, además, este año hemos lanzado los I Premios Albia de Sostenibilidad, un certamen pionero en España, que ha tenido una gran acogida, demostrando el compromiso del sector con el cuidado del medioambiente, la innovación, el impacto social y las prácticas de buen gobierno.
Los I Premios Albia de Sostenibilidad son los primeros de este tipo impulsados en el sector, que tienen como objetivo fomentar y reconocer las prácticas que minimizan el impacto ambiental de esta industria, el desarrollo del talento humano que genere un impacto social positivo o la visión sostenible que pueda aplicarse al servicio funerario mediante el uso de tecnología.
Estos premios son una manera de incentivar y reconocer el esfuerzo y la creatividad de quienes están liderando este cambio en la industria demostrando que es posible despedir y honrar la memoria de los seres queridos de manera respetuosa con el medioambiente.
En definitiva, el sector funerario cumple con una función esencial en la sociedad, como último eslabón de la cadena sociosanitaria, por lo que debe cumplir y liderar una responsabilidad importante en términos medioambientales, sociales y de buen gobierno. Por ello, en Albia, nos hemos marcado un propósito claro: transformar el modo en el que la sociedad percibe el valor que aportamos.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Internacional contra el Cambio Climático.