Cuando me preguntan por qué Coca-Cola atrae al mejor talento me invade una sensación de orgullo. Y cuando lo que me plantean es la vieja pregunta de cuál es nuestra fórmula, la respuesta es inmediata y certera: «No lo busques en el etiquetado, solo míranos. Nuestro principal ingrediente es la diversidad». Nos esforzamos cada día para conquistar nuevas cotas, porque no nos conformamos, y en materia de igualdad y talento diverso queremos ser ambiciosos. Estamos convencidos de que es la única fórmula posible.
Porque una compañía diversa es, además, más creativa, es más innovadora y también es más rentable. Concebimos esa diversidad e inclusión desde una perspectiva a su vez muy amplia: de género, de generaciones, de formación, de procedencia… porque fomentar el talento implica una minuciosa observación de las variadas capacidades y habilidades de las personas. Y nos interesa mucho lo que puede aportar cada una de ellas. Necesitamos que esto resuene dentro y fuera, porque es un enfoque que necesitamos, con el que ganamos todos: la empresa, el empleado y la sociedad.
También explico todo esto cuando me preguntan por qué aspiramos a ser una compañía liderada en un 50% por mujeres a nivel mundial en 2030. Porque estamos tan convencidos de nuestra fórmula que impregnamos las principales políticas y acciones de un claro enfoque por la igualdad, y procuramos que todos los días del año sean 8 de marzo. Nos esforzamos por un lugar de trabajo y un mundo con igualdad de género y creemos que invertir y empoderar a las mujeres no solo nos beneficia directamente a nosotras, sino también a nuestro negocio y a nuestras comunidades. En Europa nos hemos comprometido a alcanzar ese porcentaje del 50% de liderazgo femenino mucho antes, en 2025. Y en Coca-Cola Iberia desde el año 2021 esa meta es ya una realidad: aquí ya somos una compañía liderada al 50% por mujeres.
Estamos orgullosos del progreso logrado en los últimos años, pero somos conscientes de que aún queda camino por recorrer, en el que aprender y mejorar de forma colectiva para abrazar la igualdad. Para ello contamos con diversas iniciativas y órganos, como el Consejo Global de Mujeres Líderes de la compañía, integrado por hombres y mujeres en todo el mundo, con el objetivo de acelerar el desarrollo del talento femenino hacia roles de mayor responsabilidad e influencia. O el foro interno Coca-Cola Women in STEM (acrónimo en inglés para ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), dedicado a impulsar talento creando conciencia sobre las oportunidades STEM que empodere, forme e inspire a las mujeres de nuestra compañía. También nos asociamos con comunidades locales para alentar a las jóvenes a explorar estas carreras y colaboramos con organizaciones sin ánimo de lucro que, del mismo modo, persiguen cerrar la brecha de las mujeres en roles STEM a nivel mundial.
Otra de las apuestas para reducir las barreras a las que se enfrentan muchas mujeres a nivel profesional es GIRA Mujeres. Este programa de formación persigue la disminución de esa brecha de género a través del emprendimiento femenino y potencia la innovación social gracias a las ideas de negocio que nacen de los proyectos propuestos. Acabamos de lanzar la octava edición de una comunidad que engloba ya a más de 21.000 mujeres de entre 18 y 67 años en España desde su creación en 2016.
Por todo esto, se entenderá perfectamente mi pasión por lo que hacemos cuando me hacen esa pregunta. Y sé que ese orgullo por el trabajo que estamos realizando es compartido y, sobre todo, fruto del esfuerzo de muchos equipos y personas en todo el mundo. De hecho, hace dos años pedimos a los empleados de todo el sistema Coca-Cola que compartieran sus perspectivas sobre el liderazgo, los aliados, los prejuicios y la creación de un futuro más brillante para las mujeres. Sus respuestas fueron muy contundentes y estimulantes. Reina el convencimiento de que cualquier persona puede ser “agente de cambio”. Se describe a las mujeres en nuestra empresa como “resilientes, comprensivas, inspiradoras y realmente solidarias y talentosas”. Y nos une la necesidad de “incorporar el foco de la igualdad en todo lo que hacemos: contratación, promoción, coaching, desarrollo…tiene que ser lo mismo para hombres y mujeres”.
Trabajamos con convencimiento absoluto en la creación de una cultura muy inclusiva, definida por nuestros siete valores fundamentales: liderazgo, pasión, integridad, diversidad, colaboración, calidad y responsabilidad. La sociedad es diversa, y eso es precisamente lo que nos enriquece. Por eso nuestra plantilla debe ser un reflejo de esa diversidad, tanto a nivel mundial como en nuestros mercados locales. Así que, si me preguntas, sí, estoy convencida, esa es nuestra fórmula.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: 8M, Día Internacional de la Mujer 2024.