‘No mires arriba’, la famosa película de Adam McKay estrenada recientemente en una plataforma de streaming, cuenta la odisea de dos astrónomos para advertir al mundo de que un meteorito de grandes dimensiones se acerca a la Tierra y amenaza con destruirla por completo. El apocalipsis se acerca, pero nadie quiere mirar hacia arriba.
Esta distopía negacionista, lejana e imaginaria, se puede trasladar a nuestro día a día. Muchas personas no quieren mirar hacia abajo y consideran la basuraleza como algo inofensivo cuando se trata de una realidad cuyas consecuencias ya estamos percibiendo y que nos atañe a todos. Una percepción que solo podemos cambiar desde la prevención, la educación y la concienciación.
Precisamente hoy, celebramos el Día Mundial del Medio Ambiente, una fecha crucial para reflexionar y poner sobre la mesa que el cuidado de nuestro planeta es uno de los mayores retos que tenemos como sociedad. Pero, también, por qué no, es una fecha para celebrar, para poner de relieve las acciones que todos los defensores del medio ambiente realizamos para cuidar nuestro entorno.
Y es que, en un día como hoy, hay que poner en valor el esfuerzo realizado por todos los ciudadanos. Cada día son más las personas que entienden que somos parte de la naturaleza y que debemos protegerla. Cada vez son más los que sí miran abajo. De hecho, si miramos el V estudio sociológico ‘Actitudes frente a la basuraleza’, elaborado por More Than Research para LIBERA, – proyecto de SEO/BirdLife en alianza con Ecoembes – nos damos cuenta de que cerca de la mitad de los españoles tiene como primera reacción recoger un residuo al verlo abandonado en un entorno natural, aunque esa basuraleza sea ajena.
Esta cifra ha aumentado en más de siete puntos en comparación con la encuesta realizada en 2021 y refleja que la sociedad española en su conjunto está cada vez más concienciada con el problema medioambiental que supone la basura en la naturaleza. Y estos avances se están consiguiendo gracias al compromiso y el impulso de todos. Desde voluntarios y voluntarias de colectivos locales, los que sobre el terreno se movilizan, hasta educadores y técnicos ambientales, científicos, administraciones y empresas.
Se trata de sumar pequeños gestos que, sin duda, tienen un gran beneficio para nuestro planeta. Abrir los ojos, mirar hacia abajo y actuar. Si todos comprendemos que somos parte del problema de la basuraleza, entenderemos que todos somos parte de la solución. Acabar con ella solo será posible con la corresponsabilidad de todos. Porque, como decimos desde LIBERA, “aunque no sea nuestra basura, sí es nuestro problema”.
En esta línea, tenemos el objetivo de seguir agitando conciencias, involucrando a toda la sociedad en la lucha contra la basuraleza. La próxima cita: el 11 de junio, en la VI edición de ‘1m2 contra la basuraleza’. Un día en el que miles de personas saldremos simultáneamente a playas, ríos, campos, conectados en una misma misión: recoger la basuraleza que nunca debía haber terminado allí.
Os invitamos a que os unáis y que, juntos, sigamos trabajando para conseguir una sociedad más comprometida y educada en los valores de respeto y cuidado al medio ambiente. Mirar hacia abajo para poder, en el futuro, seguir mirando hacia arriba.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día del Medio Ambiente