La temperatura media global se ha incrementado 0,8 ºC desde 1880 y cada una de las tres últimas décadas es sucesivamente más caliente que la anterior. La concentración de CO2 en la atmosfera ha aumentado un 40% desde 1750, los océanos se han calentado, la cantidad de nieve y hielo ha disminuido, el hielo ártico en verano ha disminuido y el nivel del mar ha aumentado.
El calentamiento es inequívoco y las evidencias indican que la responsabilidad de la actividad humana en todos estos fenómenos es clara.
Nos lo podrán decir más alto pero no más claro: si todo lo que hacemos en el futuro es repetir lo que hemos venido haciendo hasta ahora, lo que obtendremos en el futuro será aquello que ya hemos obtenido. Después de cinco informes, ¿cuántos mas serán necesarios para entender que es necesario un cambio de rumbo hacia un modelo socioeconómico bajo en emisiones, más eficiente en el consumo de recursos y una relación no depredadora con la naturaleza?
Afortunadamente existen empresas que ya trabajan en esta dirección. Un ejemplo lo tenemos en las organizaciones adheridas al Programa de Acuerdos Voluntarios de la Generalitat de Cataluña (www.gencat.cat/canviclimatic). Estas organizaciones se comprometen a hacer públicas sus emisiones de GEI y a realizar actuaciones para reducir esta huella.