En los últimos 5 años hemos visto un salto cualitativo y cuantitativo a nivel de la RSE
Las grandes empresas la han integrado en sus estrategias. Las pymes la están implementando o se la plantean, aunque todavía no se hayan lanzado. Lo importante es que la RSE se ha hecho un hueco en la agenda de las empresas y ha llegado para quedarse.
Los consumidores también se interesan, cada vez más, por el trato a los trabajadores, la ética, el medio ambiente o las causas sociales pero no les llega el mensaje de la RSE, que a menudo queda muy lejano.
El reto de trasladar esta apuesta por la RSE a la sociedad se consigue a través del uso de un lenguaje adecuado en la comunicación y de las relaciones diarias con clientes, proveedores y, especialmente, con los empleados, los auténticos portavoces de la empresa.
Sólo a través de empleados convencidos conseguiremos transmitir que somos responsables.