Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Internacional de las Personas con Discapacidad
Hoy, 3 de diciembre, se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha que nos invita a reflexionar sobre la importancia de impulsar, entre otras muchas acciones, entornos laborales inclusivos. La inclusión de personas con discapacidad en las empresas va mucho más allá de una cuestión de cumplimiento normativo o de responsabilidad social. Es, en realidad, una oportunidad estratégica para enriquecer el talento, la creatividad y la competitividad de la compañía.
Una cultura de integración mejora la competitividad de las empresas, genera un mejor ambiente laboral, y tiene un impacto positivo en la sociedad, promoviendo una mayor igualdad.
En mi opinión, es fundamental que la alta dirección comparta esta visión y la priorice, eliminando los sesgos e incorporando políticas de inclusividad entre los objetivos estratégicos, así como en sus políticas internas de contratación y accesibilidad. En TÜV SÜD, trabajamos con las empresas un liderazgo ágil y humanista en el que el líder debe actuar como referente, siendo ellos los primeros en dar ejemplo, promoviendo la diversidad y creando un entorno en el que empleados y empleadas, sin importar su condición, puedan prosperar y aportar su talento.
Un factor clave para la inclusión efectiva es la accesibilidad. No se trata solo de adaptar el entorno físico, con rampas o baños accesibles, por ejemplo, sino también de integrar herramientas tecnológicas que permitan a las personas con discapacidad desempeñar sus funciones de la manera más eficiente. En TÜV SÜD, contamos con programas de sensibilización y formación para todo el personal, que contribuyen a reducir estigmas y prejuicios. Estos programas nos informan sobre los diferentes tipos de discapacidad y nos enseñan a brindar apoyo adecuado a quienes lo necesiten.
Los procesos de selección también deben ser inclusivos. Es importante que las ofertas de empleo sean accesibles y que las entrevistas se adapten a las necesidades de cada candidato. En TÜV SÜD promovemos que las personas con discapacidad sean evaluadas por sus habilidades y competencias, reforzando su mayor potencial, y nos aseguramos de que todos los candidatos tengan la oportunidad de demostrar su verdadero potencial.
También es fundamental que, en la etapa post contratación, las políticas de la empresa sean claras y accesibles, y que se brinde acompañamiento continuo a los nuevos empleados con algún tipo de discapacidad. En este sentido, los programas de mentoría y apoyo personalizado facilitan su integración y fomentan la colaboración entre equipos, garantizando que cada trabajador reciba el apoyo necesario para desarrollarse plenamente en su entorno laboral.
Además de las políticas y estrategias, la inclusión debe ser parte integral de la cultura de la empresa. Por ello, en TÜV SÜD celebramos eventos como el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que visibilizan las historias de éxito de nuestros empleados con discapacidad y fomentan la sensibilización a través de charlas y talleres. Cuando la inclusión se convierte en un valor compartido por todos los miembros de la organización, los empleados se sienten parte de un propósito común, lo que refuerza el compromiso, la motivación y el sentido de pertenencia. Para medir el impacto de estas políticas inclusivas y garantizar su efectividad, realizamos evaluaciones periódicas del entorno laboral y de la satisfacción de los empleados, lo que nos permite identificar áreas de mejora y seguir evolucionando.
Con todo, los beneficios de fomentar la inclusión son claros y cuantificables. Las empresas que adoptan estas prácticas mejoran su productividad y el ambiente de trabajo, fortaleciendo además su reputación como organizaciones responsables y comprometidas con la diversidad. Por su parte, las personas con discapacidad aportan experiencias y perspectivas únicas que enriquecen a los equipos, impulsando la creatividad y la innovación.
Al avanzar hacia la integración plena de las personas con discapacidad, estamos construyendo un mundo laboral más equitativo, diverso e innovador, que a su vez impacta positivamente en la sociedad en su conjunto. Con cada paso hacia la inclusión, no solo fortalecemos nuestra organización, sino que también ayudamos a crear una sociedad más justa y solidaria para todos.