En España, en el año 2050, las personas mayores de 65 años representarán más del 30% del total de la población. Los octogenarios llegarán a superar la cifra de cuatro millones.
En el caso español, el fenómeno del envejecimiento se observa especialmente acelerado, como consecuencia de una mayor longevidad, ya que en menos de 30 años se ha duplicado el número de personas mayores de 65 años. Este proceso se ve acentuado por la baja tasa de natalidad que se viene registrando desde hace algunas décadas.
Los datos actuales muestran que la población mayor de 65 años se sitúa alrededor del 17% de la población total, con más de 7 millones de personas (Instituto Nacional de Estadística-INE, 2008), de las que aproximadamente un 25% son octogenarias.
Estas estimaciones son aún más pesimistas en estudios internacionales de prospectiva y en las proyecciones llevadas a cabo por la Organización de Naciones Unidas (ONU), que sitúan a España en el año 2050 como el país más envejecido del mundo.
Además, la generación del 'baby boom' (nacidos entre 1958 y 1977) comenzará a jubilarse en la próxima década y tendrá su pico en 2042 con la incorporación de unos 723.000 potenciales pensionistas con mayor esperanza de vida, con lo que a mitad de siglo el total de pensionistas llegará a los 16,4 millones, el doble que en la actualidad.
Esto es harto conocido por todos ya que existen numerosos estudios, análisis y diagnósticos, pero existen pocos intentos de abordaje desde la perspectiva laboral.
Tenemos claro que el envejecimiento es un problema multifactorial que afecta a las organizaciones desde muchos puntos de vista tanto en lo estratégico como en lo táctico y que ya en la actualidad produce efectos que no estaban planificados ni tenidos en cuenta en la toma de decisiones.
Desde La Fundación San Prudencio, creemos firmemente, que ha llegado la hora de coger “el toro por los cuernos” y enfrentarnos a un problema que es estratégico para España en general y para las empresas y organizaciones y personas trabajadoras en particular.
Creemos que los diagnósticos están mayoritariamente hechos, las proyecciones también, pero es la hora de acometer los cambios y de crear herramientas y modelos que ayuden a las organizaciones a integrar la gestión de la edad en su estrategia y gestión diaria. Es decir, pasar de las palabras a la acción.
Desde la Fundación San Prudencio se ha detectado una necesidad por parte de las empresas de abordar el problema del envejecimiento con una perspectiva estratégica que permita planificar las acciones a acometer de forma ordenada y poder sensibilizar a las personas trabajadoras sobre los problemas que antes o después van a surgir en el mundo laboral.
La Fundación San Prudencio cuenta con un observatorio de tendencias donde analizamos la percepción de nuestro colectivo (más de 400 empresas y 30.000 trabajadores y trabajadoras) a los que consultamos temáticas para posteriormente poner en marcha servicios que satisfagan las necesidades detectadas.
Así en nuestras últimas encuestas detectamos que de las personas que contestaron a nuestras encuestas:
- Un 80% de las empresas NO gestionan la edad en sus organizaciones
- Un 95% cree que no estarán trabajando con más de 65 años
- Un 90% cree que estará menos motivado/a
- Un 75% cree que no estará en condiciones de trabajar con más de 65 años
- Un 74% indicaron que los puestos de trabajo repercuten en la salud
- Un 56% declara tener problemas musculoesqueléticos como consecuencia de su actividad laboral
Por ello, La Fundación ha puesta en marcha diversas iniciativas para impulsar y poner en marcha un Centro de Promoción de la Salud Laboral para aumentar la competitividad de nuestras empresas y mejorar la calidad de vida de la población trabajadora que debido al envejecimiento va a necesitar de nuevos servicios que faciliten a las organizaciones la planificación y gestión de la edad sobre todo en dos ámbitos: la prevención de riesgos laborales y la gestión multigeneracional del talento y los RRHH.
Para ello ya está disponible NORDIC KLINIKA: el PRIMER CENTRO DE DIAGNÓSTICO MUSCULOESQUELÉTICO INTEGRAL EN ESPAÑA Y CENTRO APLICADO AL ÁMBITO LABORAL EN EUROPA. Este centro está a disposición de las empresas para que puedan contar con una herramienta con probada eficacia para la reducción del absentismo derivado de los problemas musculoesqueléticos. Las empresas pueden ofrecer este tratamiento a sus trabajadores como un beneficio social. De manera individual cualquier persona puede realizar también el tratamiento de las patologías como las lumbalgias, el dolor cervical y dorsal, el dolor de espalda, los dolores en las rodillas, las hernias discales o la osteoporosis, entre otras muchas.
Además, estamos trabajando para incorporar la variable edad en el ámbito de la prevención de riesgos laborales y una herramienta para poder elaborar un plan de gestión de la edad particularizado a cada empresa.
Pero éstas son sólo dos piezas de un puzle que irá tomando forma con otros servicios para constituir un Centro de Promoción de la Salud Laboral integral, innovador, multidisciplinar y con las últimas tendencias del mercado.