La organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente definen el empleo verde como «aquel que reduce el impacto ambiental de empresas y sectores económicos hasta alcanzar niveles sostenibles».
Una de las características de dicho empleo radica en su transversalidad, afectando tanto a los sectores primarios como el industrial, administración o servicios. De esta forma, según la OIT, vaticina que la transición hacia una economía verde podría crear 60 millones de empleos de este tipo en los próximos 15 años.
Estos trabajos “disminuyen el impacto ambiental de las empresas y de los sectores económicos aumentando la eficiencia del consumo de energía, materias primas y agua, descarbonizando la economía y reduciendo la emisión de gases de efecto invernadero, así como minimizando o evitando cualquier forma de residuo y contaminación, y restaurando los ecosistemas y la biodiversidad, además, permiten adaptarse al cambio climático”, asegura la OIT.
Actualmente se presentan deficiencias y escasez de trabajadores cualificados para ocupar empleos verdes, lo que impide que puedan desarrollarse sectores como los de las energías renovables, la eficiencia energética y de recursos.
Es por ello, que urge la identificación de tales sectores y subsectores como punto de partida a la hora de proponer y determinar diferentes medidas dirigidas al sistema educativo para adaptar con plenas garantías el sistema de formación a estas nuevas y fundamentales necesidades futuras.
Sobre esta reflexión, Jp Morgan y la Fundación Konecta deciden unirse para lanzar en 2021 el Hub de Empleo verde, un proyecto que pretende, además de identificar nichos de empleo en la economía verde, crear un modelo de inserción propio para jóvenes vulnerables y con escasa formación.
Como primer paso, se ha realizado un estudio a través de encuestas, entrevistas y focus group a centros de formación del sector, y a más de 300 empresas medioambientales o con potencial de generar empleos verdes. https://www.fundacionkonecta.org/wp-content/uploads/2018/10/ESTUDIO-EJECUTIVO-EMPLEO-VERDE.pdf. Entre las conclusiones del estudio, se pone de manifiesto la necesidad de promover y consolidar un ecosistema de empleo verde como punto de encuentro e identificación de oportunidades para jóvenes vulnerables.
A partir de ahí, se han puesto en marcha diversas iniciativas dentro del Hub, con el objetivo de identificar oportunidades de empleo, formar e insertar laboralmente a jóvenes, principalmente de la Comunidad de Madrid. Para ello, el Hub cuenta con un gran número de entidades colaboradoras del ámbito empresarial (empresas y patronales empresariales), asociaciones y entidades sin ánimo de lucro que representan a los jóvenes vulnerables y organismo públicos. Pretende ser el centro de conocimiento y experiencia conjunta para potenciar el empleo entre jóvenes vulnerables en la economía verde.
La situación actual, sólo en la Comunidad de Madrid, indica que de los 180.000 jóvenes vulnerables que hay, el 81% no recibe prestaciones y el 56% no tiene titulación académica, siendo estos potenciales trabajadores en la economía verde, además la diversidad de perfiles que se demandarán en la economía verde permitirá dar oportunidades laborales a muchos de estos jóvenes.
Cabe destacar, que la creciente demanda por parte de la sociedad de productos y servicios más sostenibles y el hecho de que estos sectores estén capeando la crisis sanitaria mejor que otros, hacen que las empresas verdes tengan cada vez mayor potencial y sean una oportunidad real de negocio. Y es que la economía verde no está reñida con la rentabilidad, sino que compatibiliza el objetivo último de crecimiento económico y la creación de empleo con el uso eficiente de los recursos naturales llamado trabajo verde.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: 7º aniversario de los ODS, junto a T-Systems y Villafañe&Asociados