Llevar una buena alimentación es una de las mejores formas para proteger nuestra salud. En este sentido, la calidad de la dieta influye directamente en la salud de nuestro corazón, pudiendo llegar a reducir hasta un 30% el riesgo de enfermedad cardiovascular y disminuir hasta un 70% las probabilidades de volver a padecer una patología de esta índole.
La obesidad, además de ser uno de los principales factores de riesgo cardiovascular, es uno de los mayores problemas de salud que preocupan tanto a autoridades sanitarias como a los expertos. Sin ir más lejos, la última Encuesta Nacional de Salud, publicada en marzo de 2013, indica que cerca del 54% de la población española mayor de 18 años tiene obesidad o sobrepeso y que en los últimos 25 años la obesidad ha aumentado un 10%. Si consultamos la incidencia de este fenómeno en la población infantil (de dos a diecisiete años) vemos que el contexto es igual de preocupante, ya que un 27,8% de esta población padece obesidad o sobrepeso.
Actualmente, la obesidad y el sobrepeso representan ya el quinto factor principal de riesgo de defunción en todo el mundo, con más de 2,8 millones de personas adultas fallecidas cada año como consecuencia de esta enfermedad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Para intentar revertir este ascenso, desde la FEC cada año lanzamos mensajes destinados a recalcar la importancia de unos buenos hábitos alimenticios, también entre los niños, y recordando que comiendo frutas y verduras y realizando ejercicio de forma habitual, podemos reducir nuestro peso contribuyendo así a prevenir una posible enfermedad cardiovascular en el futuro.
Además, para conseguir una mayor concienciación e inherencia de estos hábitos por parte de la población, la Fundación Española del Corazón (FEC) lleva a cabo distintas campañas dirigidas a promover una alimentación saludable, como es la Semana del Corazón, que tiene por objetivo concienciar a la población sobre la importancia de llevar unos hábitos de vida saludables. Esta acción, que lleva realizándose desde hace casi 30 años por distintas ciudades españolas, invita a la gente a realizarse pruebas gratuitas a pie de calle para medir y conocer su riesgo cardiovascular, asistir a seminarios sobre alimentación cardiosaludable o recibir formación acerca de cómo realizar una reanimación cardiopulmonar, entre otras muchas actividades.
Hay que recordar que la enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte en nuestro país ya que son las responsables del 30,5% de los fallecimientos que se producen en nuestro país, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y gran parte de los infartos que suceden podrían prevenirse siguiendo unos buenos hábitos alimenticios y con la práctica regular de ejercicio.