Con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, seis profesionales de Menarini, entre un total de 476 referentes femeninos, hemos participado este año en la cuarta edición de #100tifiques, una iniciativa que se ha desarrollado a través de numerosas charlas simultáneas que han combinado el formato presencial y el virtual en 427 centros escolares de Cataluña, contando con la participación de cerca de 40.000 alumnos.
Este tipo de actividades siguen siendo necesarias para poder fomentar el interés de las jóvenes por las denominadas carreras STEM, un área en el que, según la Unesco, sólo el 28 por ciento de los investigadores en todo el mundo y el 35 por ciento de los estudiantes de estas carreras son mujeres. La proporción de doctoras en este campo en la Unión Europea es de apenas el 37 por ciento.
Desde muy pequeña siempre he sentido curiosidad sobre cómo funciona el mundo, los seres vivos y, en particular, el organismo humano, sintiéndome muy atraída por las asignaturas de ciencias. Siempre me han interesado las cuestiones relacionadas con el progreso científico y médico, razón por la que decidí estudiar una carrera STEM. Afortunadamente en mi ámbito familiar no hubo nunca diferencias en torno a trato o estudios determinados en función del género. Mis padres siempre me apoyaron y animaron a estudiar la carrera que yo eligiese. Decidí estudiar medicina y me especialicé en farmacología clínica.
Hoy en día desarrollo mi carrera profesional como responsable del Área de Investigación Clínica en Laboratorios Menarini, donde también trabajan otras muchas compañeras ya que, afortunadamente hay una importante representación femenina en los distintos departamentos técnicos de la compañía. Considero que, en la actualidad, las mujeres que quieren enfocar su carrera hacia profesiones científicas pueden hacerlo cada vez con menos trabas, además ya no son tan patentes los casos de discriminación laboral, que de hecho se persiguen y combaten cada vez más en todos los ámbitos y, existe una mayor mentalización social en cuestiones de igualdad; además la legislación y los esfuerzos de las administraciones públicas están cada vez más en línea con esta aspiración de todos.
Actividades como #100tifiques continúan siendo muy necesarias en nuestra sociedad pues los adultos somos un modelo y referente para las nuevas generaciones. Siempre es positivo que los jóvenes sientan nuestro apoyo y disposición a animarlos a cumplir sus sueños e inquietudes, a realizarse, a cumplir con sus aspiraciones y ayudarles a desbloquear sus miedos. Guiarles en este esfuerzo es muy importante.
En lo que respecta al papel de la mujer en ámbitos técnicos y científicos creo que está progresando de forma muy positiva. Mi impresión es que cada vez hay mayor presencia femenina en ellos.
A pesar de ello, he observado en ocasiones que algunas jóvenes continúan teniendo cierto miedo a cursar una carrera STEM, por si la dedicación a una profesión científica les va a convertir en bichos raros, en mujeres poco femeninas, o por si esta decisión les va a exigir sacrificios y va a resultar poco compatible con sus deseos de formar una familia. Es papel de todos trabajar para que desaparezcan los sesgos de género, para que no se limiten las aspiraciones profesionales de las mujeres desde la infancia. Debemos trabajar para educar en igualdad a los hombres y mujeres del mañana, porque es cosa de todos educar a nuestros jóvenes sin limitaciones ni barreras de género en educación y futuro desempeño laboral.
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