En ISDIN compartimos el orgullo de ser una compañía certificada B-Corp porque no solo nos preocupamos por la salud de las personas, a través del cuidado de la piel, sino que también trabajamos para tener un impacto positivo en la sociedad y en el planeta.
En esta línea, dentro del área de ESG definimos dos compromisos muy claros: uno es trabajar para inspirar un futuro sin cáncer de piel, y esto lo hacemos con campañas de concienciación y también de acción directa, como el proyecto de ayuda a las personas con albinismo en Mozambique, que tienen una incidencia muy alta de cáncer de piel; y el otro, regenerar el mar Mediterráneo.
Estos días coincidiendo con el Día Mundial de los Océanos se ha hablado mucho de la grave situación que vive el Mediterráneo, uno de los mares más preciados y admirados del mundo, pero también el que está en una situación más extrema: es el mar más contaminado y con mayor presencia de plásticos, es el más sobreexplotado en cuanto a pesca, el que se calienta más rápido – un 20% más que el resto de mares y océanos-, y el que pierde más biodiversidad.
En ISDIN llevamos años preocupados por los mares e intentando poner nuestro granito de arena para conservar la salud y la belleza del Mediterráneo, gestionando nuestro impacto ambiental, reduciendo nuestra huella de carbono y apostando por el ecodiseño de nuestros productos para que tengan el mínimo impacto posible en el mar.
También con acciones como las recogidas de plásticos, que realizamos junto a la Startup de impacto Gravity Wave que se encarga de recoger plásticos del Mediterráneo y reciclarlos para darles una segunda vida. El año pasado nos comprometimos a qué por cada fotoprotector Fusion Water Magic vendido en el mundo retirariamos del mar el equivalente a su peso en plástico, y retiramos 65 toneladas, y para este año nos hemos propuesto el reto de llegar a las 200 toneladas.
Además, colaboramos con la investigación y en concreto apoyamos el Proyecto COLPLAI, un programa del CSIC dirigido por la doctora Cristina Romera, que investiga los efectos de la descomposición del plástico en el medio marino. Este estudio analiza los compuestos químicos que los plásticos sueltan en el agua de mar, en qué condiciones liberan más cantidad y también cómo afectan estos compuestos químicos a los microorganismos marinos que están en la base de la cadena trófica.
Pero si una cosa tenemos clara es que solos no podremos lograrlo. Es necesario que más empresas se comprometan y unan sus fuerzas para luchar contra la degradación del Mediterráneo y reclamar su protección.
Por ello, desde ISDIN, impulsamos la Bluewave Alliance, una alianza de empresas con propósito, emprendedores de la sostenibilidad y, lo más importante, la comunidad científica, que son los expertos y los que tienen que guiar nuestras acciones.
Y lo que nos dice el comité científico es que si se protegen de manera efectiva áreas específicas que cubren el 30% del Mediterráneo, y se gestionan de manera sostenible las actividades en el resto, las poblaciones de peces aumentarían y todo el ecosistema marino se recuperaría por sí solo, beneficiando a los millones de personas que dependen del medio marino.
Algunas organizaciones medioambientales y de defensa de los océanos ya han pedido al gobierno que continúe con el compromiso y redoble los esfuerzos para conseguir la protección efectiva del 30% del Mediterráneo español para 2030. Pero para conseguir este objetivo también es muy importante la implicación y la concienciación de la ciudadanía para que todos juntos podamos reclamar devolver la salud y la belleza de nuestro mar.
Por ello desde la Bluewave Alliance se está impulsado el proyecto SeaSpore que une Ciencia, Arte y Tecnología para regenerar la vida marina en el Mediterráneo. La esencia del proyecto son esporas marinas, co creadas con artistas y convertidas en obras de arte gigantes, que se instalarán en las principales capitales de la costa mediterránea para devolver la vida al fondo marino.
La fusión de ciencia, arte y tecnología pretende generar concienciación entre los ciudadanos que podrán visitar exposiciones de réplicas de las obras de arte submarinas que se instalarán en la superficie y a través de la tecnología ver cómo se genera vida marina en el fondo. Nuestro sueño sería instalar esporas en todas las capitales mediterráneas que se unan a este movimiento para devolver la salud y la belleza al mar mediterráneo y que nuestros hijos puedan disfrutar del mismo mar sano y diverso en el que crecieron nuestros padres.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial de los Océanos 2024, en colaboración con ISDIN.
