Hay días del calendario que no pueden dejar indiferente a nadie. El día 8 de marzo es uno de ellos, porque celebramos el Día Internacional de la Mujer y, con él, celebramos a los miles de millones de mujeres que, a lo largo de la historia, han hecho de este mundo un lugar mejor con su esfuerzo, su pasión, su compromiso, sus sacrificios y su amor.
El camino hacia la igualdad no ha sido, ni es, fácil. Está lleno de obstáculos y estereotipos que hacen que las oportunidades para las mujeres se vean limitadas, en muchas ocasiones, y ello las impulsa a tener que tomar decisiones en detrimento de su felicidad. Hemos avanzado mucho durante las últimas décadas, pero todavía queda mucho trabajo por hacer.
Mastercard, como compañía comprometida con la igualdad, y yo personalmente, como mujer, trabajamos incansablemente por hacer que la sociedad sea justa y respetuosa con todas. Es por ello por lo que, durante años, hemos llevado a cabo iniciativas que sobrepasan nuestro ámbito de actuación y hemos puesto nuestra tecnología y nuestro esfuerzo al servicio de la igualdad.
Uno de los mejores ejemplos que representa este compromiso es nuestro programa educativo Girls4Tech™, que busca cerrar la brecha en materias STEM desde la educación y para ello muestra nuestra tecnología de pagos e involucra a nuestros empleados como modelos y mentores con el objetivo de inspirar una carrera en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas en niñas de todo el mundo.
Girls4Tech ha llegado a casi 2 millones de niñas en 45 países desde 2014, pero nuestro compromiso es llegar a 5 millones para 2025 en todo el mundo.
Además, apostamos por poner en valor la brillantez de las mujeres que han decidido dedicarse a carreras que, tradicionalmente, eran consideradas para hombres. Así, concedemos, junto a la Real Academia de Ciencias, unos galardones necesarios que reconocen y dan visibilidad a mujeres jóvenes y sobresalientes con la esperanza de que sean un incentivo para que más mujeres se animen a romper los estigmas.
A escala global, Mastercard es orgullosa defensora de la ratificación de la Enmienda de Igualdad de Derechos a la Constitución de los Estados Unidos, un hito que pone de manifiesto nuestro largo trabajo por promover la inclusión y la igualdad. Y, de manera constante y en todos los países en los que estamos presentes, nos aliamos con socios locales para ofrecer soluciones innovadoras que refuercen nuestra causa, como el programa Start Path Empodera, una aceleradora de negocios centrada en promover el emprendimiento liderado por mujeres; o la tarjeta en colaboración con Seneca Women, la primera de su clase que premia a los titulares cuando compran en negocios propiedad de mujeres y que impulsa las donaciones a organizaciones sin ánimo de lucro con proyectos centrados en la mujer.
Todos estos ejemplos no hacen más que ilustrar un compromiso que forma parte de nuestro ADN y con el que personalmente, como ingeniera, trabajadora, madre y mujer, siento un fuerte vínculo. Porque el mundo será como queramos que sea, debemos unir nuestras fuerzas y construir un espacio en el que las mujeres puedan prosperar en todos los aspectos. Debemos hacerlo por ellas, por todas las que lucharon con su sacrificio e ilusión; y por nosotras, por las que hemos heredado una base sobre la que seguir construyendo. Por todas.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial de la Mujer 2022.